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El álbum de la infancia de Valentín Herráiz

Nunca le gustó el fútbol ni los juegos que en su época parecían corresponder a chicos. El diseñador era más feliz jugando con muñecas o peinando a su hermana y sus amigas

Domingo, 25 de abril 2021, 12:00

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Valentín era un niño rubio, precioso, a quien su madre y su tía vestían de punta en blanco.

Valentín era un niño rubio, precioso, a quien su madre y su tía vestían de punta en blanco.

Valentín era un niño rubio, precioso, a quien su madre y su tía vestían de punta en blanco.

Con su madre, en laguna del río Júcar, en Uña.

Con su madre, en laguna del río Júcar, en Uña.

Con su madre, en laguna del río Júcar, en Uña.

Valentín todavía recuerda a Lobo, el perro que fue su mascota, y que le acompañó en sus juegos de infancia.

Valentín todavía recuerda a Lobo, el perro que fue su mascota, y que le acompañó en sus juegos de infancia.

Valentín todavía recuerda a Lobo, el perro que fue su mascota, y que le acompañó en sus juegos de infancia.

En la foto tendría unos dos o tres años, y vestía como en la época, con pantalón corto, aunque hiciera frío.

En la foto tendría unos dos o tres años, y vestía como en la época, con pantalón corto, aunque hiciera frío.

En la foto tendría unos dos o tres años, y vestía como en la época, con pantalón corto, aunque hiciera frío.

Con sus padres, su hermana María Ángeles, a la que siempre llamó 'teta', y su tía Elena, que era modista y vivía con ellos.

Con sus padres, su hermana María Ángeles, a la que siempre llamó 'teta', y su tía Elena, que era modista y vivía con ellos.

Con sus padres, su hermana María Ángeles, a la que siempre llamó 'teta', y su tía Elena, que era modista y vivía con ellos.

Con su padre tuvo una relación complicada que con los años mejoró.

Con su padre tuvo una relación complicada que con los años mejoró.

Con su padre tuvo una relación complicada que con los años mejoró.

Era un niño angelical, como se ve en esta foto de la Primera Comunión, con su traje de marinero, el rosario y el libro de rezos.

Era un niño angelical, como se ve en esta foto de la Primera Comunión, con su traje de marinero, el rosario y el libro de rezos.

Era un niño angelical, como se ve en esta foto de la Primera Comunión, con su traje de marinero, el rosario y el libro de rezos.

Era un niño inquieto, pero al mismo tiempo tenía un mundo interior que no llegaba a mostrar.

Era un niño inquieto, pero al mismo tiempo tenía un mundo interior que no llegaba a mostrar.

Era un niño inquieto, pero al mismo tiempo tenía un mundo interior que no llegaba a mostrar.

A los catorce años se dejó el pelo largo, se puso un pendiente y conoció a Francis Montesinos, que le abrió a un mundo donde por fin se sintió cómodo.

A los catorce años se dejó el pelo largo, se puso un pendiente y conoció a Francis Montesinos, que le abrió a un mundo donde por fin se sintió cómodo.

A los catorce años se dejó el pelo largo, se puso un pendiente y conoció a Francis Montesinos, que le abrió a un mundo donde por fin se sintió cómodo.

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