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Lunes, 25 de mayo 2020, 18:13
El 'fast ferry' Cecilia Payne de Baleària ha partido este lunes a las cinco de la tarde desde el puerto de Dénia (Alicante) rumbo a Ibiza y Palma, con 183 pasajeros a bordo de los 800 de aforo para garantizar la distancia.
La naviera retoma la alta velocidad en esta ruta y en las travesías Alcúdia-Ciutadella e Ibiza-Palma. Este martes operará el Ramon Llull uniendo la Península con Formentera e Ibiza.
Los pasajeros del Cecilia Payne han estrenado el arco de medición de temperatura, previo al embarque en la estación marítima de Dénia, informa la compañía en un comunicado.
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Tras embarcar por grupos para evitar aglomeraciones, los pasajeros han recibido gel hidroalcohólico y han usado mascarillas tanto en el embarque como durante el trayecto. En las terminales y a bordo se realizan limpiezas constantes con productos certificados de desinfección.
Los buques y las estaciones marítimas han incorporado señalizaciones para mantener las distancias, además de carteles y vídeos que recuerdan las recomendaciones y mamparas en las zonas de atención directa. Baleària espera obtener la etiqueta 'Global safe site Covid-19' en su máximo grado (excellence) por parte de la entidad de certificación e inspección internacional Bureau Veritas, que analiza periódicamente la posible presencia de Covid-19 en los buques que operan actualmente y en las estaciones marítimas de Dénia y València.
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