Beatriz Flamini: las graves consecuencias para la salud que conlleva el aislamiento

La deportista Beatriz Flamini es uno de los temas más comentados de la semana. La deportista ha salido de una cueva de Motril (Granada) tras permanecer bajo tierra durante 500 días. Lo que empezó siendo todo un reto y un experimento científico ha acabado convirtiéndose en un récord mundial de espeleología.

El objetivo del reto era estudiar cuáles pueden ser las consecuencias del aislamiento social y la desorientación temporal extrema en una persona. Las personas que permanecen durante un tiempo prolongado en aislamiento pueden llegar a padecer importantes síntomas de depresión, ansiedad y problemas de memoria. Después de tantos días en oscuridad se ha tenido que poner unas gafas de sol para proteger sus ojos. Es otro de los primeros síntomas de que su larga estancia en la cueva puede traer una serie de consecuencias. Además, no ha estado expuesta al sol lo que le ha podido generar una serie de trastornos hormonales que por ejemplo pueden interferir en su ciclo del sueño y en su concentración.

Flamini ha explicado que nunca pensó en abandonar pese a los momentos difíciles y para soportar este reto de condiciones extremas recurrió a lo que ella considera «muy importante, la coherencia»: «Que lo que piensas, lo que sientes y lo que dices estén unidos».

Leer, pintar, tejer son algunas de las cosas en las que se ha afanado para pasar el tiempo, si bien recalca que «la fuerza la ha sacado del aquí y el ahora», y que se ha centrado en las «sensaciones del cuerpo» para decidir cuándo comer, beber o dormir.

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