Los bichos que puedes tener en las gomas de tu nevera

La higiene y la seguridad alimentaria son aspectos fundamentales en cualquier casa o establecimiento donde se manipulan alimentos. Los electrodomésticos desempeñan un papel crucial en la conservación y el manejo de productos perecederos, y la nevera, en particular, es un componente esencial en la cocina de la mayoría de las familias. Sin embargo, muchas veces pasamos por alto la importancia de mantener estos aparatos limpios y en óptimas condiciones, poniendo en riesgo nuestra salud.

La nevera, con su capacidad para mantener los alimentos frescos y prevenir la proliferación de bacterias, es un elemento clave para garantizar la seguridad alimentaria. Pero, si no se mantiene de manera adecuada, podría convertirse en un entorno ideal para el desarrollo de «huéspedes no deseados que pueden transmitir enfermedades». Así lo ha explicado Miguel Assal, un conocido sanitario que emplea sus redes sociales para compartir consejos sobre cuestiones relacionadas con la salud y el bienestar.

Concretamente, Assal ha querido destacar la posibilidad de que la goma de nuestra nevera esté siendo el hogar de una plaga de bichos, capaces de transmitir enfermedades como «salmonelosis, hepatitis infecciosa o infecciones intestinales y urinarias», asegura. Así, tal y como explica el sanitario, es importante estar atentos a las señales que pueden alertar sobre su presencia.

Si quieres comprobar si tu nevera está plagada de estos desagradables inquilinos, debes vigilar si han aparecido grietas o bultos en la goma. También puede darse el caso de que hayas observado que aparecen de la nada bichos por el suelo de la cocina, o bien en otras piezas del frigorífico. Lo más alarmante de esta situación, recuerda, es que pueden entrar en contacto con la comida que vamos a ingerir después.

En caso de que creas que puedes tener bichos en la goma de la nevera, es fundamental que te pongas manos a la obra con su limpieza extrema y en profundidad. En este contexto, Assal recomienda desconectarla, sacar toda la comida de su interior y limpiar a fondo todos los rincones del frigorífico.

Para hacerlo, existen diversos trucos caseros, aunque los más efectivos suelen incluir vinagre blanco. Un consejo efectivo es preparar una solución de agua caliente y vinagre para limpiar tanto la goma de la puerta como el interior de la nevera. Para ponerlo en práctica, comienza desconectando la nevera. Después, retira todos los alimentos del interior y colócalos en una zona fresca o en una nevera portátil para mantenerlos a la temperatura adecuada. Prepara una solución mezclando partes iguales de agua caliente y vinagre blanco en un recipiente grande. Empapa un trapo o esponja suave en esta mezcla y limpia minuciosamente la goma de la puerta de la nevera, prestando especial atención a las áreas difíciles de alcanzar, donde un cepillo de dientes viejo puede ser útil. Asegúrate de secar bien la goma con un paños seco antes de volver a colocar los alimentos y enchufar la nevera.

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