¿Qué hacen los camareros con las propinas: se las quedan o las echan al bote?

El tema de las propinas es uno de los más controvertidos en el mundo de la hostelería. Clientes y profesionales no se ponen de acuerdo en cuánto a cuánto es lo adecuado dejar, qué es mucho y qué es poco, cómo se reparte entre los empleados o si el propietario tiene derecho a quedarse una parte del bote o no.

Soy camarero ha reabierto de nuevo el debate al lanzar en X la siguiente pregunta: «Cuando el cliente te da la propina en la mano y te dice 'toma, esto es solo para ti, no para el bote' qué hacéis?».

Como siempre las opiniones son de lo más variado. Muchos creen que, en cualquier caso, la propina debe ir al bote y repartirse entre todos los empleados:

«Al bote. Hay que ser respetuosos con los compañeros aunque te lleves mal. Ellos también hacen el oficio»; «Meterlo al bote. Todos nos esforzamos por igual»; «Al bote. Sin discusión»; «darle las gracias y meterlo al bote sin que me vea»; «Sonreír, dar las gracias y cuando se va echarlo al bote»; «Al bote sin dudarlo. y el bote se reparte también en cocina»; «La pregunta ofende a cualquier camarero de bien».

Otros muchos explican que tienen derecho a quedárselo si así lo desea el cliente:

«El cliente siempre tiene razón»; «Yo me lo quedo»; «Al bolsillo del tirón»; «Quedártelo y no estafar al cliente»; «Si esa mesa me la he trabado yo, me la quedo yo; si no, al bote dependiendo de los compañeros que tenga»; «Si es la voluntad del cliente, que es el que te da el dinero, no veo el debate»; «Yo me lo metía al bolsillo. Compañerismo había poco y no repartían el bote acorde a los que éramos»; «Tomarlo, te encontró más profesional que al resto».

También son muchos quienes se quejan de que el empresario se queda parte del bote y por eso prefieren quedárselo:

«Pues viendo que en la mayoría de locales el jefe echa mano del bote... creo que sería la menor manera de dejar propina»; «Yo se lo metía en el bolsillo -al camarero- en mi restaurante habitual, porque sabía que que los jefes se quedaban una parte de la propina»; «El bote siempre va para el jefe. Con lo cual, dinero al bolso»; «Se de sitios que el dueño coge el 50% y el resto se reparte»; «Depende. Trabajé en un sitio donde el bote se lo quedaban los jefes. Aguanté hasta cierto momento y empecé a quedármelo. Luego me acusaron de robo, fuimos a juicio y lo gané».

• Temas
• Hostelería