El Mentiroso: un juego de cartas para todas las edades

Los juegos de cartas son un pasatiempo extendido en todo el mundo y conocido por la mayoría de las generaciones. A pesar de que su origen no se conoce con certeza, varias teorías apuntan a China en el siglo XII. Sin embargo, fue desde Europa que se hizo la extensión a los demás rincones del mundo. Se dice que este tipo de juegos llegó al viejo continente a través de los intercambios con Oriente por los lazos entre los reinos cristianos de España y los árabes.

Existen diversos juegos de cartas que además de compartir risas desarrollan la agilidad mental. Uno de los juegos más populares es el mentiroso cuyo objetivo es deshacerse de todas las cartas de la mano a través de engaños y mentiras. Para jugar es necesario un mínimo de dos personas y una baraja española de 40 cartas.

Antes de empezar a jugar es importante conocer las palabras que se usan durante el juego. Mano, se trata de los juegos y combinaciones de cartas. Palo, grupos en los que se dividen las cartas en la baraja (oros,copas, espadas y bastos). Mazo, el conjunto de cartas que conforman la baraja.

Para comenzar, en primer lugar se debe seleccionar a la persona que va a repartir las cartas. Esto se realiza por medio del azar. Los jugadores toman una carta y el participante con la carta más alta es el responsable de mezclar y repartir. Después el jugador ubicado a su izquierda será el encargado de cortar el mazo. El repartidor debe entregar todas las cartas entre los participantes, una carta en cada vuelta. Todos deben quedar con la misma cantidad.

Desarrollo del juego

El jugador que se encuentre a la derecha del repartidor es el primero en jugar. Durante su turno puede deshacerse de entre una y tres cartas que dejará boca abajo sobre la mesa. Seguidamente, debe decir en voz alta el número y valor de las cartas. Puede decir la verdad o mentir.

A continuación, el participante situado a la derecha del que nombró su combinación debe decir si esta es verdadera o falsa. Si el jugador piensa que es verdad tiene que seguir con su turno y tirar cartas al centro. Por otro lado, si piensa que es falsa, debe decir en voz alta mentiroso y levantar las cartas. En caso de que estuviera en lo cierto, el jugador inicial debe coger las cartas del montón. En cambio, si se ha equivocado y realmente decía la verdad el último jugador se queda con el montón de cartas. Para continuar con el juego, el participante ubicado a la derecha del perdedor es el que comienza la nueva mano.