Agustín Carrilero, director de ESIC CV: «Universidades y empresas se necesitan y tienen que caminar juntas»

El director de ESIC Comunidad Valenciana, Agustín Carrilero, apuesta con firmeza por un cambio en la manera de enfocar la educación superior y en la relación entre la universidad y la empresa. Una simbiosis que debe dar como resultado algo más que la suma de las partes. Ante la incierta evolución del mercado laboral en los próximos años, Carrilero, doctor en Integración de Nuevas Tecnologías en la Organización Empresarial, cree que instituciones como ESIC transmiten al alumnado competencias que son bases sólidas para lo que depare el futuro.

-Finaliza el año y es momento de hacer balance, ¿cuáles son los logros más destacados y los desafíos superados por ESIC Valencia?

-Ha sido un año positivo, estamos satisfechos de los resultados obtenidos. Y lo hemos logrado con un alto nivel de autoexigencia, creo que es el motor de los resultados. Nos dedicamos a formar personas, y destacaría como logro el buen trabajo de todo el equipo para hacer crecer a la comunidad profesional con un aprendizaje constante. Uno de los motivos de mayor satisfacción es la creciente cantidad de amigos que tiene ESIC.

-Y si hablamos del 2024 ¿cómo se planea desde la institución capitalizar las tendencias emergentes en educación y empleabilidad en el próximo año?

-Nos planteamos el 2024 con optimismo. Necesitamos avanzar con foco y determinación. Hay que asumir que muchas de las viejas recetas no nos servirán, estamos inmersos en una época de grandes cambios. Pero en ESIC tenemos la costumbre de avanzar a sabiendas que habrá incertidumbre y límites. Vivimos momentos en el que los miedos se disfrazan con excusas y debemos afrontarlos mediante la humildad, la empatía y la sencillez.

-¿Cuáles son, desde su perspectiva, los principales obstáculos que enfrentan tanto el sistema educativo como las empresas para satisfacer la creciente demanda de profesionales cualificados?

-Destacaría algunos como que estamos en un mundo donde los sistemas de investigación y desarrollo se tensionan una y otra vez por el efecto de la competencia estratégica entre China y EEUU, nuestra innovación sigue siendo insuficiente, debemos aspirar a más. No podemos tener una administración lenta y lastrada por la burocracia y la inflexibilidad. Asistimos resignados a los pobres resultados de nuestros estudiantes de primaria en las pruebas de matemáticas o comprensión. El mundo se encamina a una era de innovación brutal, donde las aplicaciones de inteligencia artificial (IA) generativa, como ChatGPT, son la punta de un iceberg que se gesta a nivel global y donde hay que hacer una apuesta clara en ciencia y tecnología.

-Por lo tanto, ¿considera vital la importancia de la colaboración entre las empresas y las universidades?

-Es fundamental. Más que lanzar 'powerpoints' hacia abajo, hay que inyectar confianza entre las universidades y las empresas. La confianza se siembra, y sin siembra no hay cosecha. Creo que, si logramos crear un marco claro e, insisto, de confianza, es lo que permitirá lograr un todo que transcienda la suma de las partes.

-Desde su experiencia, ¿cuáles considera que son los beneficios más destacados, tanto para las empresas como para las universidades, al establecer una colaboración estratégica y sólida?

-Los beneficios son enormes. Universidades y empresas se necesitan y tienen que recorrer el camino juntas. Pero se tiene que trabajar para encontrar ese momento de reflexionar y compartir e intentar ser más profundos en comprender la realidad de la universidad y de la empresa. Y es evidente que hay que realizar cambios, tenemos que hacerlos, pero si asumimos que los momentos de incomodidad son los mejores momentos de crecimiento.

-La tasa de empleabilidad del antiguo alumno de ESIC es del 94,3%. ¿cómo se consigue ese alto porcentaje?

-Con un equipo de personas comprometidas y apasionadas por su trabajo. No sabemos qué va a pasar en los próximos diez años, pero tenemos la capacidad de formar en competencias a nuestro alumnado para cimentar una estructura sólida que dé respuesta a las necesidades y cambios que se van a producir en el entorno.

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