Una experta explica por qué hay tanta diferencia de precio entre gasolineras y qué implica realmente

Al parar a repostar, muchos conductores se encuentran con una amplia diferencia de precios entre unas gasolineras y otras. En algunas estaciones, el litro de combustible puede costar varios céntimos menos que en otras, lo que lleva a preguntarse si realmente hay diferencias en la calidad del carburante o si el precio responde a otros factores. Esta duda genera un debate recurrente entre quienes priorizan el ahorro y quienes prefieren acudir a marcas reconocidas para evitar posibles riesgos.

Isabel Muramunt, una de las responsables comerciales de la empresa Petromiralles, ha abordado esta cuestión en el pódcast 'Rutas de éxito'. Al ser consultada sobre la controversia entre las gasolineras low-cost y las convencionales, ha afirmado de manera tajante que las diferencias en la gasolina y el diésel que se ofrecen en unas y otras estaciones son escasas y no afectan al rendimiento de los vehículos. «El gasoil viene todo del mismo sitio», asegura Muramunt, quien añade que la principal distinción entre ambas es, en realidad, «un tema de imagen».

Las grandes compañías buscan atraer a un determinado perfil de cliente, algo que consiguen, entre otras estrategias, con precios más elevados. Además, Muramunt explica que estas empresas «cuidan el producto con aditivos», mientras que las de bajo coste comercializan un carburante más 'básico', aunque perfectamente válido para los motores. Otra diferencia relevante es la oferta de servicios adicionales. Las gasolineras tradicionales, además de contar con un mayor número de surtidores, suelen ofrecer instalaciones complementarias, como tiendas o áreas de descanso, y se ubican en lugares estratégicos, especialmente cerca de autopistas.

Este tipo de infraestructuras y la presencia de personal en pista elevan los costes operativos de las gasolineras de marca, lo que inevitablemente se refleja en el precio del combustible.

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