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Martes, 7 de noviembre 2017, 18:19
El níscalos o 'Lactarius deliciosus' es la seta silvestre que más se consume en España. Su sombrero mide entre 4 y 15 cm., de color anaranjado. Aparece asociado a pinares jóvenes y su carne es compacta, con sabor acre en crudo y olor a fruta.
El Diario Montañés
La chantarela o 'Cantharellus Cybarius' es uno de los hongos más apreciados en gastronomía. Su sombrero mide entre 4 y 12 cm. y su color varía entre el amarillo y naranja. Brota a la sombra de encinas, robles, hayas y pinos. Su sabor es agradable y el olor recuerda al albaricoque.
El Diario Montañés
La seta de cardo o 'Pleurotus Eryngii' es para muchos la mejor de las setas comestibles. El sombrero mide entre 4 y 12 cm. y su color varia entre marrón oscuro y crema. Nace unida a las raíces en descomposición de ciertos cardos y su sabor es dulce y suave.
El Diario Montañés
La trompeta de los muertos o 'Cratarellus cornucopioides' brota por la festividad de los Santos y su sombrero llega hasta los 10 cm-, en forma de trompeta. Es de color gris o negro y nace en los bosques de robles y hayas. De carne escasa, aromática y agradable sabor.
El Diario Montañés
Amanita caesarea. Es la reina de las setas, por su vistosidad y su alto valor gastronómico. Sombrero de entre 6 y 20 cm., y es de color anaranjado intenso. Su hábitat son los bosques de castaños, robles, encinas y alcornoques. Es esponjosa y gruesa, de sabor dulce, similar a la nuez.
El Diario Montañés
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