Madrid desmonta la historia del semáforo de cuatro colores

Un semáforo de cuatro colores en Madrid, en pleno barrio de Salamanca. Un semáforo que añade una luz blanca a las tradicionales luces roja, amarilla y verde. Un semáforo diseñado para permitir el paso de vehículos de emergencia y dar prioridad a los vehículos autónomos. El Ayuntamiento de Madrid ha tenido que desmentirlo todo. Ni hay un nuevo semáforo, ni hay una luz blanca ni hay cuatro colores.

«El Ayuntamiento no sabe de dónde sale esa información de un semáforo piloto con luz blanca. Ese semáforo al que se han referido varios medios ya existía, no se ha instalado ahora ni tiene luz blanca. Tiene luz roja, ámbar intermitente y ámbar con flecha para desvío para advertir del cierre del túnel», explican desde el consistorio, dando por zanjado el asunto de una nueva señalización que no existe, algo que corrobora la DGT remitiéndose a los argumentos ofrecidos por el Ayuntamiento.

La idea de introducir un semáforo con una luz blanca se basa, realmente, en un estudio realizado por ingenieros de transporte de la Universidad de Carolina del Norte. Según su investigación, este nuevo color podría mejorar significativamente la gestión del tráfico, especialmente cuando los vehículos autónomos, que no requieren intervención del conductor, comiencen a ser comunes en nuestras calles.

La propuesta busca optimizar la manera en que estos vehículos procesan la información para facilitar una integración segura con los vehículos tradicionales. Además, el uso de la luz blanca pretende agilizar el flujo en las intersecciones y contribuir a una reducción en el consumo de combustible.

Sin embargo, el semáforo de cuatro colores en España con esa nueva luz no existe, y los ayuntamientos tampoco tienen competencia para crearlos, dado que esta corresponde a la Administración General del Estado. El Reglamento de Circulación recoge los tipos de señalizaciones semafóricas que hay y no contemplan esa cuarta luz con ese fin.

El artículo 147 del citado reglamento, que regula los semáforos cuadrados para vehículos, o de carril, señala que se permite «una luz blanca o amarilla en forma de flecha, intermitente o fija, apuntada hacia abajo en forma oblicua, indica a los usuarios del carril correspondiente la necesidad de irse incorporando en condiciones de seguridad al carril hacia el que apunta la flecha, toda vez que aquel por el que circula va a quedar cerrado en corto espacio»

En realidad, en Madrid sí que existe un semáforo con cuatro luces en Plaza de Castilla, pero la cuarta es simplemente una flecha de desvío para advertir el cierre del túnel ubicado en las inmediaciones, como ya había desvelado el Ayuntamiento de Madrid.

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