J.Z
Lunes, 18 de julio 2022, 01:11
Subir al coche en pleno verano después de tenerlo aparcado en la calle convierte los primeros segundos dentro de él un infierno. Las altas temperaturas a las que se encuentra sometido el vehículo provoca que nada más entrar se encuentre muy caliente y genera una situación de incomodidad en el conductor. Por ello, son importantes ciertos consejos para poder enfriar el interior lo más rápido posible.
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Lo primero que se recomienda nada más entrar es bajar todas las ventanillas para provocar que el aire caliente acumulado salga fuera y el aire acondicionado tarde menos en enfriar. Es bueno circular algunos minutos de esta manera para que el calor vaya saliendo del coche.
Otra opción recomendable es utilizar un truco que puso en marcha un profesor japonés. Consiste en bajar la ventanilla del coche del copiloto y, a continuación, abrir y cerrar la puerta del conductor de forma rápida y enérgica unas cinco veces.
En cualquier caso, una vez puesto el aire acondicionado, es importante la orientación de las rejillas de salida. El aire frío es más denso que el caliente y tiende a descender, por lo que lo recomensable es ponerlas hacia arriba, de modo que se distribuya mejor por todo el vehículo.
Es habitual ponerlo de frente para recibirlo en la cara de forma más directa, pero este acto puede generar enfermedades respitorias, por lo no es nada recomendable hacerlo.
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