El mensaje de un repartidor de Glovo a los que hacen pedidos en días de tormenta: «La gente está muy equivocada»

Los días de mal tiempo siempre desatan un debate sobre los pedidos a domicilio. Cuando la lluvia y el viento golpean, muchos usuarios de aplicaciones como Glovo y Uber Eats se plantean si es apropiado hacer un pedido o si, por respeto y seguridad hacia los repartidores, deberían abstenerse de encargar comida o artículos. Las opiniones están divididas: mientras algunos consideran que el mal tiempo aumenta los riesgos para los trabajadores que entregan pedidos en bicicleta o moto, otros usuarios ven los servicios de reparto como una comodidad indispensable, sin importar el clima.

Álex Solla, repartidor y creador de contenido en TikTok conocido como @alexboken, ha compartido sus experiencias en este tema, aclarando las realidades de trabajar en condiciones climáticas adversas. Con una mezcla de anécdotas y reflexiones, Solla ha comentado sobre lo que supone para un repartidor este tipo de situaciones y ha dejado un mensaje claro a quienes dudan si pedir en días lluviosos.

«La gente está muy equivocada con respecto a esto», comienza diciendo Solla en su publicación. Según él, existe la idea errónea de que los repartidores preferirían que nadie pidiera en días de mal tiempo, cuando en realidad, «estamos deseando que todo el mundo pida». Aclara que muchos repartidores, al ser autónomos, pueden tomar la decisión de cancelar un pedido si consideran que el trayecto es peligroso. Pero si los clientes no hacen pedidos en esos días, los repartidores pierden oportunidades de trabajo y, por lo tanto, dinero.

Solla también señala la diferencia entre las grandes plataformas, como Glovo y Uber Eats, y los pedidos en restaurantes locales, donde los repartidores suelen estar contratados. En el primer caso, los autónomos pueden elegir si realizar el reparto o no, mientras que, en el segundo, es más probable que los trabajadores dependan de las decisiones de la empresa.

En este contexto, Solla confesaba que apenas había ganado 4 euros en un día reciente de lluvia, lo cual subraya cómo el volumen de pedidos afecta directamente sus ingresos. Comenta que en días de lluvia los pedidos suelen tener un coste adicional, y los repartidores pueden aprovechar esta demanda para ganar más dinero. «Así que, que no os dé pena pedir», insiste, recordando que, si consideran que el trayecto es inseguro, ellos mismos pueden cancelar.

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