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Parece un cuento de hadas. Chico conoce chica. Ella quiere ser diseñadora de moda. Él modelo. Y en el camino se encuentran y surge no ... sólo el amor, sino un proyecto profesional en común que este viernes ha debutado con un gran éxito sobre la pasarela 080 de Barcelona. La historia comienza con un proyecto final de curso, el que tiene que presentar María Undo para convertirse en diseñadora de moda. Dani de Villanueva, que quería ser modelo, la ayudó a terminar su carrera y juntos se embarcaron en algo mucho más grande, que ha desembocado en una firma que se llama Avec Amour, las palabras con las que él firmaba los cuadros que le regalaba en el confinamiento.
Sólo ellos saben hasta qué punto ha sido duro este camino, en el que ya van por su tercera colección, en la que él dejó de lado su sueño de ser modelo para acompañarla en el mundo del diseño de moda. María le enseñó confección y juntos hacen todo el proceso, desde el diseño, el patronaje, las selección de telas...
Los adornos de cerámica convierten en algo muy especial esta colección, llamada Cannon Beach. Además, las pinturas al óleo decoran los bolsos vintage, y su compromiso con la sostenibilidad les ha llevado a usar tejidos de anticuario o detalles de punto. «La colección, en sintonía con el espíritu de la marca, destaca por la integración de piezas de cerámica que realizamos a mano en nuestro estudio, así como la presencia de telas antiguas encontradas en anticuarios o mercados costero», explica la pareja. Durante la pasarela han regalado galletas de la marca valenciana Pepina Pastel, una original iniciativa porque las pasarelas se convierten, cada vez más, en experiencias.
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Cannon Beach es en realidad un canto a los sueños que no se han podido cumplir, a todo aquello que no ha sido posible. «Concebimos la colección como un espejismo, una declaración de intenciones enmascarada, un reclamo de aquello que no pudimos vivir. Ballet. Un verano frío en la costa de Oregón», dicen. Todo aquello que no ha podido hacerse realidad, que en el caso de María el ballet, o Estados Unidos si hablamos de Dani, donde quiso vivir y no llegó a hacerlo. Así, la melancolía se refleja en los tonos blancos y negros, mientras que el ballet en el tul o los corsés.
No han sido los únicos valencianos que se han subido a la pasarela 080 de Barcelona. Lo ha hecho Anaïs Vauxcelles con su firma 404 Studio, también Santi Mozas con Compte Spain y el alicantino Dominnico. Santi Mozas ha querido, en la colección que presentó este jueves sobre la pasarela, verla como una forma de entender un cambio, «una liberación de lo previamente establecido y creación de una nueva historia para, romper moldes y ser explícitos». Compte Spain crea sus piezas de manera artesanal y ética y sus colecciones se crean 100% a mano en España. Para Santi es muy importante que la producción sea local, respetar el proceso de creación y diseño, pero sobre todo a los artesanos que trabajan y colaboran con la marca.
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