Todos los motivos por los que Hacienda te puede poner una multa muy grave

Hacienda no cesa en su lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida y ejerce una insistente vigilancia sobre movimientos de dinero en busca de conductas sospechosas. La Agencia Tributaria presta especial atención al dinero en efectivo, cuyo uso ha limitado recientemente con la modificación del límite con el que se puede operar en metálico, que pasa de los 2.500 a los 1.000 euros de tope. El Ministerio tiene una lista de transacciones que considera preocupantes y por las que pueden poner en marcha una investigación hasta conocer al detalle el origen del importe.

Según la naturaleza de la falta, el Ministerio puede poner hasta tres tipos de sanciones que varían en función de la gravedad de la infracción: leves, graves y muy graves. Pero ¿qué supone que nos pongan una sanción grave por parte de la Agencia Tributaria? ¿Qué transacciones clasifica Hacienda dentro de este tipo de infracciones?

La gravedad de la sanción para Hacienda está determinada por la intención de infringir la ley y las cantidades defraudadas del ciudadano. En base a esto, las infracciones graves para la Agencia Tributaria son aquellas en las que la base de la sanción es superior a 3.000 euros y existe ocultación por parte del ciudadano. Este tipo de faltas pueden darse por ejemplo cuando se retienen cantidades, se empleen facturas y documentos falsos, o se lleve incorrectamente la contabilidad y que esto implique un porcentaje entre el 10% y el 50% de la base de la sanción.

Por lo que respecta a las infracciones muy graves, son aquellas que recaen en quienes emplean medios fraudulentos. También cuando la infracción se basa en cantidades retenidas y el importe es superior al 50% de la base de sanción.

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