LAS PROVINCIAS
Lunes, 6 de febrero 2017, 14:28
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María Rodrigo Molino derrochó humor y simpatía durante toda su vida. Tanto es así que su familia quiso que en su muerte ese fuera el recuerdo que quedara de ella. La anciana era lectora habitual de las esquelas del periódico, por lo que sus familiares decidieron que en su propia esquela, publicada en el diario ABC, tras los habituales datos, figurara esta frase: "Para un día que salgo en una esquela y no me veo".
Según publica el diario 'Ideal', María solía empezar la lectura de los diarios por esa sección y la acomapañaba con sus comentarios sobre edades, familias, o apellidos en el caso de que fueran ilustres o conocidos. Con el habitual buen humor que la caracterizada, un buen día comento a sus familiares: "Hay que ver, que el día que salga yo no me voy a ver". Tras su muerte, su familia recordó esa humorística frase en el velatorio, y decidieron que debía estar en su esquela.
Cuando en el periódico leyeron el contenido de la esquela, les llamaron sorprendidos, y sobre todo para comprobar que en efecto se trataba del deseo de la familia.
La hija de María, Lali Campos, asegura que ha recibido llamadas de amigos y conocidos que le aseguraron que leer esa frase les llenó de alegría, porque sintieron que eran sus palabras.
María Rodrigo falleció a los 86 años de edad, y ha dejado en Alcalá de Guadaira el recuerdo de la persona divertida, simpática y humorística que fue. Amante de leer las esquelas de los diarios, ahora la suya se ha convertido en viral, dando la vuelta a España.
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