Borrar
Aemet confirma el regreso de las lluvias a la Comunitat y activa dos avisos amarillos

28 fotos

Así se ven las Perseidas

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

Martes, 13 de agosto 2019, 14:25

Modo oscuro

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Petkovichi (Bielorrusia).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Kreva (Minsk).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Kreva (Minsk).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Kreva (Minsk).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Prijedor (Bosnia and Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo.

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Radimlja (Bosnia Herzegovina).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría).

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría)

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría)
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo: Nógrád (Hungría)

Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo. El Viso (Córdoba).

EFE/Reuters/AFP
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo. El Viso (Córdoba).
Lluvia de estrellas fugaces, Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo. Su máxima actividad en Europa se da estas noches de agosto, cuando se pueden observar alrededor de 100 meteoros por hora. En realidad, son pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños que van dejando los cometas -o asteroides- a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol y que se desprenden debido al deshielo producido por el calor solar. En este caso provienen del cometa Swift-Tuttle. Así se han visto en varias partes del mundo. El Viso (Córdoba).

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias Así se ven las Perseidas