Nazaret Martín es una joven ganadera extremeña de Torre de Don Miguel, un pueblo ubicado en la Sierra de Gata. Firme defensora del mundo rural, triunfa en las redes sociales con sus vídeos. Más de 250.000 suscriptores en su canal de Youtube avalan su capacidad para comunicar.
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La muerte de una joven en Zamora por el ataque de una jauría de perros pastores -mastines y de carea- han empujado a Nazaret a publicar un vídeo que cuenta con 178.000 reproducciones en tres días. El título avanza ya claramente el sentido del vídeo: «Se nos van a echar encima por lo que ha pasado en Zamora».
«Lo que no se puede es vivir en los mundos de Yupi como vivimos en este país», se lamenta Nazaret. La joven intenta explicar las razones del ataque de los perros a la mujer en Zamora. Aunque es una gran defensora de los mastines como perros de trabajo, advierte de que éstos son los peores perros que hay si se crían mal o en una circunstancia donde haya perros más agresivos, como los carea que también participaron en el ataque.
Nazaret cuenta que nunca mantiene suelto a su perro carea si ella no está presente. Argumenta que este perro «pica a los mastines a atacar a las personas y a otros animales». «No se deben juntar mastines con otro tipo de perros. Los mastines se crían con el ganado o con otros mastines junto con el ganado, no hay más».
La ganadera recuerda que los mastines no se pueden criar a la ligera, que son perros que tienen una potencia física que puede destrozar a cualquiera. «Que son perros que están hechos por el ser humano para matar a lobos... con los perros grandes hay que tener mucho cuidado».
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Nazaret finaliza advirtiendo que «no es sano la desconexión que tienen las personas con la naturaleza y que desde las esferas políticas no se esté haciendo nada para corregir esto».
La joven Arancha paseaba por un camino entre Roales del Pan y La Hiniesta, localidades próximas a la capital zamorana, cuando fue atacada por los perros. La enfermera poco pudo hacer para defender de los canes (tres mastines y dos careas), una vez que éstos iniciaron su ataque. Recibió decenas de mordiscos y se desangró hasta morir.
Los cinco animales que atacaron a la enfermera estaban sueltos y sin supervisión de su propietario, según informó este martes la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones. La Guardia Civil ya ha confirmado que los perros estaban fuera del cercado eléctrico portátil en el que estaba confinado el rebaño. El ataque mortal, según las mediciones de los agentes, se produjo a unos 50 metros de ese vallado y sin supervisión humana alguna.
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