Los 5 alimentos prohibidos para la cena, según una nutricionista

Elegir bien qué alimentos consumir en cada momento del día es clave para mantener una alimentación equilibrada. No solo es importante tener en cuenta la cantidad de comida que ingerimos, sino también el horario en el que lo hacemos. La cena, al ser la última comida antes de dormir, requiere especial atención, ya que ciertos alimentos pueden afectar tanto al descanso como al metabolismo.

Muchas personas creen que cenar ligero es suficiente para evitar problemas digestivos o ganar peso, pero la elección de los alimentos es igual de relevante. Algunas opciones aparentemente saludables pueden ser difíciles de digerir o contener sustancias que estimulan el organismo, lo que provoca insomnio o molestias estomacales. Por ello, es fundamental conocer qué productos pueden resultar contraproducentes en la cena y optar por alternativas más adecuadas para favorecer el descanso y la salud en general.

La nutricionista Rebeca Flores, de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad Andrés Bello de Chile, ha compartido cuáles son los cinco alimentos que deberían evitarse en la cena, según recoge 'TicBeat'.

1. Setas. A pesar de ser un alimento saludable, su alto contenido en fibra y la presencia de quitina dificultan la digestión, lo que puede provocar molestias estomacales durante la noche.

2. Apio. Popular por sus propiedades diuréticas y su uso en la famosa sopa 'quemagrasa', este vegetal puede aumentar la necesidad de ir al baño durante la noche, interrumpiendo el descanso.

3. Café y otras bebidas estimulantes. El café, el chocolate y los refrescos con cafeína están completamente desaconsejados en la cena debido a su efecto estimulante, que puede alterar el sueño y dificultar la conciliación del descanso nocturno.

4. Queso. Contiene una elevada cantidad de grasa animal y tiramina, lo que puede hacer que su digestión sea más pesada y que incluso afecte la calidad del sueño.

5. Lechuga. Aunque parezca una opción ligera y saludable para la cena, su contenido en hidratos de carbono y agua puede provocar hinchazón y gases, generando malestar intestinal durante la noche.

Prestar atención a los alimentos que consumimos en la última comida del día puede marcar la diferencia en la calidad del descanso y en la salud en general. Evitar estos productos en la cena y optar por opciones más ligeras y digestivas contribuirá a un mejor bienestar y un descanso reparador.