La infusión antiedad que aporta colágeno para mejorar la piel y fortalecer los huesos

El colágeno es la principal proteína que utiliza nuestro cuerpo para dar estructura a los huesos, piel, ligamentos y tendones. Es fundamental para tener una buena salud e incorporarlo, por tanto, en la alimentación diaria debe ser esencial.

Hay alimentos ricos en colágeno como el huevo, los frutos secos (nueces, pistachos, piñones, avellanas o castañas), el pollo y la carne roja (las patas de pollo, manitas de cerdo, huesos y sesos), el pescado azul, el limón (alto en vitamina C) y la cebolla. Pero, también existen infusiones que ayudan a la creación de forma natural de esta proteína.

El té blanco es una bebida que puede hacer mucho por la piel ya que este té que proviene de los brotes jóvenes de la planta Camellia Sinensis es más antioxidante que el té verde y gracias a su elevado contenido en polifenoles, permite prevenir el envejecimiento prematuro de la piel, retrasar la aparición de arrugas y evitar que los tejidos se vuelvan flácidos. Para que nos hagamos una idea, una taza de té blanco equivale a 12 vasos de zumo de naranja, ya que contiene el triple de polifenoles.

El té blanco, además, repara y cicatriza los tejidos de la piel que han sufrido daños por causa de brotes de acné o manchas, y protege a la piel de los rayos UV.

Antes de empezar a tomar té blanco es importante asegurarse de que no será contraproducente para la salud, pues su consumo está contraindicado en:

- Personas muy nerviosas, con estrés o ansiedad.

- Pacientes con hipertensión arterial.

- Mujeres embarazadas o lactantes.

- Niños menores de 12 años.

Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.

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