A. Pedroche
Viernes, 19 de abril 2024, 01:34
Llevar un estilo de vida saludable es fundamental para gozar de una buena salud y longevidad. Hay dos aspectos que clave a los que prestar atención. El primer es la práctica de algún deporte o realizar ejercicio físico de manera regular. No tiene que ser a diario, pero es recomendable hacerlo varias veces por semana. Sobre todo si se trata de ejercicio cardiovascular. El running, el ciclismo, la natación o simplemente andar a una velocidad alta son opciones recomendadas por los expertos.
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Luego está la alimentación. Nuestras comidas deben estar basadas en cumplir con los estándares de una dieta equilibrada y variada. La constancia es la clave. Además, podemos beneficiarnos de los superalimentos. No son productos milagrosos, pero sí tienen varias propiedades que los hacen interesantes a nivel nutricional.
Por otro lado, están las infusiones. Son un gran complemento a nuestra alimentación. Se trata de bebidas medicinales que desde siempre se han tomado debido a sus propiedades medicinales. Existe una gran variedad y pueden encontrarse en cualquier supermercado o herbolario. Además, su precio suele ser asequible para todos los bolsillos.
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Existe una infusión hecha a base de una fruta que destaca por sus nutrientes y vitaminas. Se trata de el té de granada. Esta fruta posee una cobertura rugosa que alberga un fruto jugoso en su interior. Pues bien, se puede beber una infusión, según la Universidad de Harvard, «ofrece numerosas propiedades y también funciona como un remedio natural para la salud, sumado a la actividad física y un cambio de hábitos».
En el caso del té de granada, presenta las siguientes propiedades:
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Su aporte de antioxidantes resulta ideal para mejorar nuestro metabolismo. También destaca por su alto contenido en lignanos, un tipo de fitoestrógeno que se une a otros receptores en el intestino para impedir la absorción de grasa.
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El té de granda es muy bueno para ayudarnos a mejorar la presión arterial, especialmente en aquellas personas que padecen de hipertensión.
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Esta infusión tiene un efecto saciante que hará que no tengamos tanto hambre y, por tanto, ingeramos menos alimentos a lo largo del día.
Para empezar necesitarás 10 gramos de piel de granada y una taza de agua. En primer lugar, pon a hervir el agua de la taza en una olla o cazuela. Cuando rompa a hervir añade la piel. Déjalo hervir todo junto durante 7 minutos. Pasado ese tiempo, cuela el resultado sobre la taza y déjalo reposar 5 minutos.
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