El pescado azul barato y 'libre' de mercurio que ayuda a reducir el colesterol malo y a controlar el peso

El consumo de pescado debe ser imprescindible en la dieta diaria. Así lo indican desde la Fundación Española del Corazón, quienes además aconsejan que la ingesta debe ser de 3 o 4 raciones a la semana (1 ración = 125-150 g), «ya que es un alimento muy completo que nos aporta proteínas de alto valor biológico, vitamina D y del grupo B, yodo, potasio, hierro, calcio, entre otros nutrientes».

En el grupo de estos alimentos destaca la caballa, uno de los pescados azules más nutritivos. Tanto que la Organización Mundial de Consumidores (OCU) ha ensalzado sus bondades. Entre ellas, que puede encontrarse todo el año en el supermercado, aunque su época óptima suele estar entre marzo y mayo, y que cuenta con un precio económico. Además, la OCU indica que es «rico, de cercanía, con omega 3 y sin problemas de mercurio», por lo que «son todo ventajas».

La caballa es rica en ácidos grasos y omega 3, la caballa contribuye a disminuir los niveles de colesterol malo y de triglicéridos en sangre.

Además de todo lo anterior, la caballa cuenta con un aporte bajo de ácidos grasos saturados y omega 6, y un alto aporte de ácidos grasos insaturados (omega 3 y oleico). Este es uno de sus principales beneficios en relación con la salud cardiovascular.

La caballa aporta grasas saludables a nuestro organismo, no contiene carbohidratos y sí muchas proteínas de calidad. Estas tres características lo hacen un buen aliado en las dietas de adelgazamiento.

Este pescado azul también es una gran fuente de minerales imprescindibles para el organismo como el selenio (esencial para nuestro sistema inmunitario y el correcto funcionamiento de la glándula tiroides).

Recuerda que esta es información general y bajo ningún concepto sustituye el consejo de un profesional.

• Temas
• Dietética
• Alimentación