«Soy una señora de 87. Me gusta pintar con el programa Paint. Y sobre todo estar con mi familia y mis amigos». Esta es la presentación de Concha García Zaera en su cuenta de Instagram, que tiene más de 158.000 seguidores.
Publicidad
La historia de esta octogenaria resuena con más fuerza en las redes sociales que en el mundo del arte. Aficionada a pintar al óleo, su marido se puso enfermo y le empezó a molestar el olor del aguarrás, según cuenta a otros medios de comunicación. Fue entonces cuando vio en su ordenador, y concretamente en el programa Paint, una alternativa al lienzo, paleta y caballete.
Lo impresionante de la historia no es el hecho, sino la calidad de sus trabajos, que sorprende a su legión de fans. Paisajes de Valencia y de pueblos, imágenes de costas, flora y fauna… Las imágenes no las crea ella, suelen ser postales que le envían sus familiares, pero nada se le resiste al don de Concha con el lápiz y el aerógrafo.
Desde que abrió su cuenta, en noviembre del año pasado, ha pulido su técnica. Se pueden encontrar en su obra influencias de la iluminación de pintor inglés David Hockney y lo naif de Henri Rousseau, aunque seguramente todo eso sea casual. Concha se guía por su instinto, su saber hacer y su manejo marciano y magistral del programa.
La atención sobre sus obras se ha multiplicado en los últimos meses, pero Concha sigue intentando ser transparente con sus seguidores. Contesta los comentarios amables a su obra, y ahora sube hasta Stories (imágenes que se pueden ver solo 24 horas). Su nieta le está ayudando en todo esto. Esta es una de las claves de su éxito, además del manejo del ratón: la honestidad y transparencia con la que transmite las cosas en la era de las apariencias-y-nada-más en las redes sociales.
Publicidad
LAS PROVINCIAS se ha puesto en contacto con Concha a través de su nieta para hacerle una entrevista. Esta, entre risas y con mucha simpatía, nos la rechazaba contando que su abuela se siente superada por este éxito. «Hay muchísimos medios que se han interesado y le preguntamos las entrevistas una a una, no deja de ser una mujer de 87 años que no se gana la vida con esto».
En las últimas semanas ha decidido no conceder más entrevistas. Dice que está agobiada. Y entonces viene a la mente otra vez la biografía de su perfil de Instagram: «Me gusta pintar con el programa Paint». Sí, pero «sobre todo estar con mi familia y mis amigos».
Publicidad
Valencia es su hogar pero también ha sido uno de sus escenarios favoritos. Aquí sus trabajos hechos sobre la ciudad.
Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
El rincón de Euskadi que te hará sentir en los Alpes suizos
El Diario Vasco
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.