Revistas fraudulentas en nombre de la Guardia Civil

La Guardia Civil insiste en una denuncia que viene siendo habitual en los últimos tiempos. Los agentes de la provincia de Castellón han detectado de nuevo la presencia de revistas que tratan de lograr dinero utilizando su nombre. Se trata de publicaciones que contactan con empresas a las que ofrece contratos de inserción de publicidad asegurándoles que pertenece a la Benemérita, cuando en realidad no es así.

En estas revistas son habituales los emblemas del instituto armado así como de sus miembros en las diversas funciones que realizan. Incluso, en la gran mayoría de los casos llevan la inscripción Guardia Civil en sus portadas a modo de reclamo. Todo ello produce confusión entre las sociedades a las que llaman, porque además suelen hacerlo desde números ocultos.

Desde la Guardia Civil de Castellón aseguran que algunas de estas revistas van mucho más allá de lo que sería aceptable y utilizan métodos «agresivos y poco ortodoxos» para tratar de captar publicidad. «Una actitud que nunca sería llevada a cabo por los agentes de publicidad de la revista profesional de la Institución», destacaron desde el instituto armado en un comunicado, en el que anuncia que, en caso de que alguna empresa se vea en esta situación, lo primero que debe de hacer es denunciarlo en el cuartel más cercano.

Este tipo de publicaciones, en realidad no son falsas, puesto que la mayoría de ellas se encuentran inscritas en los registros del Ministerio del Interior, pero son «dirigidas y administradas por entidades ajenas» a la Benemérita, «cuya revista oficial se denomina, precisamente, Guardia Civil y sus agentes de publicidad están debidamente autorizados mediante carné expedido por la Dirección General de la Guardia Civil».

La última actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de la Comunitat en este sentido tuvo lugar hace apenas unas semanas. Concretamente, a finales de junio, la Policía Nacional detuvo a más de 40 personas por su presunta implicación en un fraude relacionado con la contratación de publicidad en revistas vinculadas a las Guardia Civil. Esta operación fue dirigida desde Madrid y aunque buena parte de los arrestados residía en Elche, también los hubo en distintas ciudades españolas. A pesar de la cantidad de detenidos, la investigación seguía abierta y no se descartaba que se produjeran más.