JAVIER MARTÍNEZ
Sábado, 31 de enero 2015, 00:16
Un bebé de seis meses se encuentra hospitalizado en estado grave tras ser maltratado presuntamente en su domicilio familiar en la localidad de Silla. El pequeño ingresó el pasado lunes en la unidad pediátrica de cuidados intensivos de La Fe con fracturas en seis costillas y daños en el hígado, mientras que el hombre acusado de causarle las lesiones fue detenido el jueves por la Policía Local tras una investigación.
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El presunto caso de malos tratos fue detectado durante un reconocimiento médico al bebé en el Hospital La Fe. La madre acudió primero con su hijo al centro de salud de Silla porque la criatura lloraba mucho. La mujer manifestó que no sabía el motivo, aunque sospechaba que podría deberse a una vacuna que le habían puesto recientemente. Tras un examen cuidadoso y detenido del pequeño, el pediatra no encontró una explicación lógica de los continuos llantos y aconsejó a la madre que lo llevara con urgencia a La Fe.
Poco después, el bebé fue sometido a un completo reconocimiento médico en el hospital y los sanitarios descubrieron que tenía fracturas en seis costillas. Además, la criatura presentaba lesiones internas en el hígado y en más órganos, posiblemente, por lo que un responsable médico informó al juzgado de guardia del presunto caso de malos tratos. El protocolo de protección del menor se activó de inmediato con una investigación policial para identificar y detener a la persona que había causado las graves lesiones al bebé.
Investigación policial
La Policía Local de Silla se hizo cargo del caso e interrogó a la madre y los abuelos del pequeño. Los agentes averiguaron que un hombre de 39 años, el padrastro de la criatura, se quedaba al cuidado del niño durante la mayor parte del día en el domicilio familiar. El individuo se encargaba de darle los biberones mientras su pareja trabajaba fuera de casa.
La investigación se centró sobre este sospechoso, que negó haber maltratado a la víctima, mientras los sanitarios realizaban más pruebas al bebé para determinar las causas de las fracturas en las costillas y las lesiones en el hígado. El hombre declaró que no había zarandeado ni golpeado a su hijastro. También aseveró que durante el tiempo que estuvo al cuidado del pequeño tampoco sufrió ninguna caída.
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El padrastro, de complexión fuerte y sin antecedentes delictivos, matizó que había abrazado con cariño al bebé para darle calor humano, aunque sin fuerza para que no sufriera daño. Su estado de nerviosismo durante el interrogatorio no le impidió responder a todas las preguntas, aunque no pudo aclarar cómo había padecido el menor las fracturas.
Declaración ante la juez
Tras ser detenido como presunto autor de un delito de lesiones, el hombre fue entregado a la Guardia Civil de Carlet, que se hizo cargo de las investigaciones. El sospechoso volvió a negar cualquier episodio de malos tratos durante su declaración ante la juez de guardia y luego quedó en libertad, aunque imputado en una causa abierta por un delito de lesiones.
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La magistrada dictó una orden de alejamiento del padrastro con respecto al bebé de seis meses y a otro niño de cuatro años, hermano de la víctima, para proteger a los dos menores. La medida cautelar se prolongará hasta que se esclarezcan los hechos y los médicos puedan determinar con más precisión la naturaleza de las lesiones del pequeño. Fuentes judiciales señalaron que el niño hospitalizado no presenta lesiones en la piel compatibles con malos tratos, como hematomas o quemaduras. El otro muchacho tampoco tiene signos aparentes de violencia.
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