Una mujer resulta herida al ser atacada por tres mastines en Náquera

Una mujer de 41 años de edad, Eva C., resultó herida al ser atacada por tres mastines, dos machos y una hembra, cuando paseaba con su perrita por los alrededores de una urbanización de Náquera. La víctima sufrio mordeduras en las piernas, nalgas y un brazo a pesar de que fue auxiliada de inmediato por los propietarios de los canes.

Los hechos ocurrieron sobre las siete y media de la tarde del jueves en un camino junto a la carretera que une Náquera con Bétera. Los mastines escaparon de una parcela cuando el dueño de la misma abrió la puerta para salir con su vehículo. Uno de los perros se abalanzó entonces sobre la mascota de Eva y después atacó a la víctima, que cayó al suelo y se protegió la cara con sus brazos. Esta acción intuitiva y la inmediata ayuda que recibió la mujer evitaron que sufriera lesiones más graves.

Tras oír los gritos de la víctima, la pareja propietaria de los mastines acudió en auxilio de la mujer. El hombre trató de sujetar a la perra, que mostró más agresividad que los machos, pero no pudo separar al animal. Fueron momentos de gran peligro y nerviosismo. Eva pedía a gritos que le quitaran a los perros, que no obedecían a sus dueños, mientras el conductor de un vehículo esquivaba a la víctima y a los canes en pleno ataque.

"Le gritamos para que parase y me ayudara y no hizo nada. Querían meterme en el coche para que los perros dejaran de morderme, pero continuó la marcha como si nada", explica indignada la mujer. El ataque de los mastines terminó cuando la propietaria de los animales se tiró encima de la víctima para protegerla. "Si no llega a ser por ella no salgo de allí", afirma Eva. "Me cubrió con su cuerpo y los perros se apartaron", añade la mujer.

Luego, la pareja metió en su coche a la víctima y la trasladó al Hospital Arnau de Vilanova, donde quedó ingresada debido a las graves mordeduras que presentaba. Los dueños de los canes, que tienen la documentación de sus perros en regla, están muy afectados por el brutal ataque. Los mastines protegen la parcela de Náquera después de que el matrimonio sufriera varios robos en su casa.