Premian el heroísmo de dos ciudadanos que evitaron un suicidio y un robo

La Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana ha reconocido el heroísmo de dos ciudadanos, uno de los cuales evitó un suicidio y el otro un robo, y les entregó la Medalla de Bronce al Mérito de la Protección Civil y de la Placa de Reconocimiento, respectivamente. El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, hizo entrega de estos galardones a ambos hombres en un acto en el que agradeció "la colaboración ciudadana en la lucha contra la delincuencia".

"Estas actuaciones de personas anónimas nos enorgullecen como sociedad y por eso deben ser reconocidas y galardonadas", según Moragues, quien defendió que en la lucha contra el delito deben estar "todos: la ciudadanía junto a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado".

El delegado entregó la medalla de bronce al Mérito de la Protección Civil por Acto de Heroísmo a Ignacio García Ros, quien en junio de 2014 evitó que un hombre se suicidase por arrollamiento del metro en la estación de Ángel Guimerá.

García Ros se hizo pasar por policía para hacer deponer su actitud al hombre, que se había tumbado sobre las vías. Con 22 años, este joven resolvió con gran serenidad la situación más difícil y peligrosa de su vida. Una tarde de junio de 2014 saltó a las vías del metro y evitó que un hombre se arrojaran al tren. El joven se hizo pasar por un policía para ganarse la confianza del suicida, al que sujetó de un brazo y retiró de la vía. Fueron momentos de gran tensión y nerviosismo en los que se rozó la tragedia en la estación de Ángel Guimerá.

Además, Moragues entregó la Placa de Reconocimiento por Acto de Heroísmo a Alejandro Gaya, de 33 años y fontanero de profesión, que impidió que una mujer fuese asaltada en el interior de su vehículo. Gaya observó por el retrovisor de su coche que en el vehículo que iba detrás de él una mujer hacia aspavientos con los brazos mientras que un hombre con casco forcejeaba con ella, por lo que bajó del coche y redujo al ladrón, que trataba de darse a la fuga en una moto, también sustraída. Se da la circunstancia de que este joven ya inmovilizó hace cuatro años a un conductor que estaba golpeando de forma reiterada el coche de una mujer y, hace un año, también intervino al ver cómo un joven estaba maltratando a su novia.