Un bombero es asistido por deshidratación e hipoglucemia en el incendio de Artana

Un bombero de 33 años que trabajaba en las labores de extinción del incendio de Artana (Castellón), en el municipio de Tales, ha sido trasladado al Hospital la Plana de Vila-real por deshidratación e hipoglucemia, según ha informado el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) en un comunicado.

El hombre fue atendido a las 20.30 horas de este jueves por un médido del Centro de Salud de Onda y una unidad de Soporte Vital Básico que forma parte del dispositivo preventivo de la Conselleria de Sanidad en el Puesto de Mando Avanzado del incendio.

Otros cinco bomberos que trabajaban en la extinción del incendio de Artana (Castellón) han sido atendidos el miércoles y el jueves por diversas causas y tres de ellos tuvieron que ser trasladados al mismo centro hospitalario.

Evolución del incendio

El incendio forestal de Artana declarado el pasado lunes que afectó a la Sierra de Espadán sigue sin dar tregua tres días después. A partir del mediodía de ayer tuvo lugar una reproducción de focos en el perímetro del incendio que mantuvo en alerta a cien efectivos terrestres y siete medios aéreos movilizados para sofocar el fuego, que ya está estabilizado, según confirmaron desde el consorcio provincial de bomberos de Castellón.

Este viernes trabajarán en las tareas de extinción un total de cinco unidades de bomberos forestales y dos capataces coordinadores, según han informado el Centro de Coordinación de Emergencias.

Las llamas han calcinado ya poco más de 1.510 hectáreas, de las cuales aproximadamente 700 afectan a la Sierra de Espadán. La reproducción de varios focos ya estaba prevista en la jornada de ayer, por lo que los operativos acometieron rápidamente las tareas de extinción. Durante los próximos días, los bomberos de Castellón esperan nuevas reproducciones de focos, ya que «las condiciones meteorológicas serán extremadamente malas, mucho calor y una bajada de la humedad relativa». Por eso, estiman que el fuego estará controlado mañana y definitivamente extinguido a finales de la próxima semana. Por el momento, el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, José María Ángel, explicó que la estabilización del incendio permitirá minimizar la presencia de operativos y seguir refrescando el perímetro.

Sin desalojos

Durante las tareas para refrescar el paraje los bomberos no ordenaron de manera oficial ayer ningún desalojo, como tampoco lo hicieron anteriormente a pesar de que el dispositivo de extinción llegó alcanzar, en los peores momentos del incendio, las 500 personas y los treinta medios aéreos. Y es que desde el consorcio apuntaron que las llamas se habían encontrado «a distancia de las urbanizaciones».

Por lo que respecta a las causas, todavía se desconoce el origen de este fuego, aunque las primeras informaciones apuntaban a una «negligencia» por una posible quema de rastrojos. De hecho, Ángel señaló que la única conjetura de la que se puede hablar es de «una mala praxis con la mano del hombre detrás».

En la zona, hace tan sólo tres meses se registró también otro incendio, iniciado en un campo de cultivo abandonado cerca de la población de la Alcudia de Veo, que fue extinguido en poco tiempo.