Piden 28 años de cárcel a una mujer por encargar el asesinato de la amante de su marido

La fiscalía ha mantenido hoy la acusación de asesinato para los cuatro sospechosos a los que implica en el crimen de Sandra Franco, una ciudadana colombiana de 34 años fallecida de dos disparos en su casa de Dénia (Alicante) el 15 de abril de 2010, según fuentes jurídicas.

El fiscal del caso sostiene que la procesada Silvia Ruth C., de 46 años, pagó a tres individuos de nacionalidad polaca, Dariusz F., Witold Cezary P. y Jerzy K., para acabar con la vida de la víctima porque mantenía una relación sentimental con su marido, Norbert C., de origen alemán y unos 70 años.

La acusación pública solicita provisionalmente para ellos penas que van desde los 20 meses a los 28 años y 5 meses de prisión por delitos de asesinato, amenazas y tenencia ilícita de armas. La acusada Silvia Ruth C. ha negado haber encargado y pagado por el asesinato.

Durante la investigación de puso de manifiesto que el móvil del crimen pudo ser que Norbert había anunciado a Silvia Ruth que la iba a abandonar por Sandra. De es manera, la esposa iba a perder gran parte de su nivel de vida, porque apenas poseía pequeñas participaciones en las empresas del marido.

El juicio por estos hechos se celebra desde el lunes de la pasada semana ante un jurado popular en la Audiencia Provincial de Alicante.

Sobre este caso, la Audiencia de Alicante ya absolvió a la revista Interviú por un reportaje titulado «No le rompas las piernas, mátala», en alusión a la orden que habría dado la acusada.

En la sesión celebrada esta mañana, la fiscalía y las defensas se han ratificado en sus conclusiones provisionales sobre el caso y han expuesto sus alegatos finales ante el tribunal popular, que mañana recibirá el objeto del veredicto para comenzar las deliberaciones.

Los defensores de los cuatro sospechosos del crimen han reclamado la libre absolución de sus clientes, al igual que ha hecho el de un quinto implicado, Norbert C., que era ajeno al complot criminal, según la acusación pública, pero se enfrenta a una petición de veinte meses de cárcel por la tenencia ilícita del arma que sirvió para matar a Sandra Franco.

Los hechos ocurrieron sobre las 13.30 horas del 15 de abril de 2010 cuando uno de los sospechosos, Jercy K., se presentó en el domicilio de la víctima, en la calle Médico Manuel Vallalta de Dénia, y presuntamente la mató de tres disparos.

Según la fiscalía, este sospechoso cobró 20.000 euros por su actuación, mientras que otros dos compatriotas, Dariusz E. y Witold Cesary P., se embolsaron al menos 7.000 euros cada uno por su intermediación en los hechos. Al principal acusado, Jercy le fijó una fianza de 5.000 euros, aunque el fiscal sostiene que cobró 20.000 por perpetrar el asesinato.

La banda de presuntos sicarios poseía en el momento de su detención seis coches de alta gama (dos Ferrari, dos Mercedes y dos Audi). Los esbirros fueron detenidos por otra operacion relacionada con una red de extorsión, tráfico de armas y blanqueo.