Una de las acusaciones del caso Marta Calvo valora pedir la pena de prisión permanente

Las acusaciones particulares y el fiscal del denominado caso Marta Calvo concretarán mañana los delitos que atribuyen a Jorge Ignacio P. J., el presunto autor de la muerte de tres mujeres en Valencia y Manuel. El magistrado Juan Luis Beneyto, titular del juzgado que ha acumulado todas las causas contra el detenido, ha citado a las partes para que formulen sus acusaciones, soliciten el sobreseimiento de las actuaciones o pidan más diligencias de investigación.

El abogado Juan Carlos Navarro, que acusará en nombre de las familias de cuatro víctimas, valora la posibilidad de calificar uno de los delitos como asesinato y pedir también la pena de prisión permanente revisable para el presunto asesino en serie cuando presente su escrito de acusación.

El letrado considera que Jorge Ignacio P. causó la muerte de Lady Marcela, en la madrugada del 15 de junio de 2019, al introducirle cocaína en sus genitales sin su consentimiento y a sabiendas de las graves consecuencias de su acción. Como ya informó LAS PROVINCIAS, esta mujer colombiana falleció por una intoxicación de droga en la vivienda donde ejercía la prostitución en la avenida de la Plata.

Según las investigaciones, el último cliente que mantuvo relaciones sexuales con la víctima fue Jorge Ignacio. Además, el presunto homicida se llevó el teléfono móvil de la mujer para que la policía no encontrara los mensajes que él le había enviado para concertar el servicio sexual.

El cadáver de la joven no presentaba signos de violencia cuando fue hallado por la dueña de la casa un día después de su muerte. Cuando la Guardia Civil detuvo a Jorge Ignacio por el crimen de Marta Calvo, la Policía Nacional aún no sabía las causas de la muerte de Lady Marcela.

Tras constatar el Instituto Nacional de Toxicología la presencia de gran cantidad de cocaína en el cadáver, el juez instructor y la fiscal Socorro Zaragozá, especialista en violencia de género, atribuyen al detenido un delito de homicidio doloso, si bien es una imputación provisional. Pero la acusación particular que ejerce Navarro entiende que hay suficientes indicios y pruebas para procesar a Jorge Ignacio por un delito de asesinato en el caso de Lady Marcela.

El magistrado también tiene previsto preguntar a Jorge Ignacio sobre la muerte de Arliene Ramos, la joven brasileña que falleció el 25 de marzo de 2019 en un hospital días después de mantener relaciones sexuales con el sospechoso en una casa de citas de la Gran Vía Marqués del Turia. La autopsia determinó que la mujer había consumido cocaína y benzodiacepina, un medicamento con efectos antiepilépticos.

Sin embargo, el forense no pudo especificar la cantidad de droga y de fármaco que había en el cuerpo de la víctima, y el Instituto Nacional de Toxicología descartó meses después una intoxicación aguda como causa de la muerte de la prostituta.

El abogado Óscar Fernández, que defiende al presunto homicida, solicitará mañana el sobreseimiento de las actuaciones por la muerte de Arliene después de que el magistrado Félix Blázquez, antes de la acumulación de las causas, imputara sólo un delito de omisión del deber de socorro a Jorge Ignacio por haber huido sin prestar auxilio a la mujer.

En lo que respecta a la muerte de Marta Calvo, los investigadores barajan como hipótesis principal que la joven falleció por una sobredosis de cocaína provocada por el homicida. El atestado de la Guardia Civil concluye que la muerte de Marta «no fue accidental ni la consecuencia de una acción imprudente», sino un homicidio doloso por «el afán egoísta del detenido por satisfacer sus inclinaciones sexuales».

La Guardia Civil sigue realizando indagaciones para buscar pistas que pudieran ayudar a localizar el cadáver de Marta Calvo, la pieza que falta para completar el puzle de la investigación criminal. El juez ha autorizado la inspección de una tablet con datos e imágenes que borró el presunto homicida antes de ser detenido. Los archivos que trata de recuperar la Guardia Civil podrían ser esenciales para averiguar dónde ocultó el cadáver y la posible implicación de más personas.

Además, los investigadores volverán a inspeccionar el coche que Jorge Ignacio utilizó para trasladar el cuerpo. Los agentes del Servicio de Criminalística examinarán el vehículo con un perro adiestrado para la búsqueda de restos cadavéricos.