El robo de 'Blusy', un pequeño chihuahua de tres meses, podría considerarse un hecho delictivo más si no fuera por la historia que parece repetirse. Un ladrón sustrae el cachorro en una tienda de Mislata y su propietaria pide la colaboración ciudadana para recuperar a su pequeño perro.
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Pilar Moreno, gerente del establecimiento y delegada en la Comunitat Valenciana de la Asociación del Sector de Animal de Compañía (ASAC), ya sufrió un robo similar el 7 de noviembre de 2007 cuando un grupo de mujeres sustrajo dos cachorros de bulldog en la misma tienda de Mislata. La ladronas distrajeron a las dependientas del establecimiento y metieron los perritos en un bolso para luego huir a la carrera.
Tras publicar LAS PROVINCIAS y otros medios de comunicación la noticia del robo, dos mujeres devolvieron los cachorros diez días después. Dejaron los canes en una caja de cartón en la puerta de la tienda y salieron corriendo. «Creemos que alguien descubrió a las ladronas y devolvieron los perros antes de que la policía las detuviera«, asegura Moreno.
«Ahora podría pasar lo mismo, y por eso estoy difundiendo por las redes sociales y por wasap la foto de 'Blusy'. Si alguien ha visto a mi chihuahua le pido, por favor, que llame a la policía, y al ladrón le diría que puede devolverlo de forma anónima«, añade la comerciante.
El cachorro fue sustraído el pasado 11 de noviembre por una pareja en la tienda Tropical Manises de la localidad de Mislata. Moreno sospecha que ya lo han vendido por internet o tratarán de venderlo en los próximos días. «Quizás la persona que lo haya comprado tiene más conciencia que el ladrón y nos devuelve a 'Blusy' si lo reconoce al ver la foto», conjetura la dueña del chihuahua.
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Según la denuncia presentada en la comisaría de Mislata, el joven que sustrajo el perro y una mujer entraron en la tienda, horas antes del robo, preguntaron el precio del cachorro y se informaron también sobre una posible compra financiada del animal. Como no podían pagar los 795 euros que costaba, la pareja dijo que iba a pensarlo y se marchó.
Ese mismo día por la tarde, el joven regresó al establecimiento y afirmó que había decidido comprar el chihuahua, aunque tenía dudas entre los dos cachorros que se encontraban expuestos en sendas cabinas. La dependienta sacó entonces a 'Blusy', el más pequeño, y dejó que el posible comprador lo acariciara y cogiera en brazos.
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El individuo aprovechó entonces para salir corriendo con el perro en brazos, cruzó la calle con el semáforo de peatones en rojo y huyó en dirección a Quart de Poblet. Dos de las empleadas de la tienda persiguieron al ladrón, pero no pudieron alcanzarlo y lo perdieron de vista. La Policía Nacional acudió después al lugar tras ser avisada del robo y se hizo cargo de las investigaciones. El establecimiento tiene cámaras de vigilancia.
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