Varias personas caminan a la entrada de la Ciudad de la Justicia, en una imagen de archivo. JESÚS Signes
Cuatro años de prisión por destrozar el rostro a su pareja a cuchilladas en la Pobla de Vallbona
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El agresor admite que sólo paró «al ver mucha sangre», acepta la acusación y se beneficia de una rebaja penal de cuatro años y medio en el caso de violencia machista
«Cogió varios cuchillos que le clavó en el cuello, en la boca, en el paladar y bajo el ojo. La mujer sufre como secuelas varias cicatrices en la boca, en la mejilla o en el cuello«. Así define la fiscal las lesiones que sufrió una vecina de la Pobla de Vallbona a causa de la brutal agresión de su compañero sentimental, Mario S., un hombre que hoy se ha sentado en el banquillo de los acusados, en la Ciudad de la Justicia de Valencia.
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Los hechos se produjeron el 23 de julio de 2018, en el domicilio de la Pobla de Vallbona en el que convivía la pareja junto a un niño menor de edad. A las diez de la mañana de hoy, una conformidad por parte del acusado ha evitado la celebración del juicio, previsto en la Sección Primera de la Audiencia de Valencia.
Inicialmente la Fiscalía de Valencia pedía una pena de nueve años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa y otro de lesiones. De acuerdo con el relato de la acusación, «durante la acusación el procesado agarró del cuello a la víctima y la arrastró hasta la cocina, donde cogió varios cuchillos que le clavó en el cuello, en la boca, en el paladar y bajo el ojo». Después, «paró por razones que se desconocen y la llevó al hospital», donde la víctima recibió auxilio sanitario urgente y quedó ingresada.
En su declaración, Mario ha titubeado respecto a la confesión de los hechos, pero finalmente los ha admitido. «Lo reconozco, estoy de acuerdo», ha dicho. «Le quité un cuchilló y se lo clavé. Luego paré porque ya vi mucha sangre y le dije que subiera al coche, que lo primero era que la atendieran a ella», ha afirmado. En el turno de última palabra, el agresor ha pedido disculpas: «Estoy arrepentido y lo siento por toda mi familia».
La mujer ha declarado detrás de una mampara para evitar ver al autor del brutal ataque. «Me arrastró hasta la cocina con un cuchillo, pero luego cogió más. Me atacó en la cocina, en el salón, en el jardín... Al final paró y me dijo que fuéramos al hospital», ha descrito la víctima.
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Tras la confesión de Mario, la fiscal ha considerado aplicar una rebaja al variar la calificación penal de los hechos, de tentativa de homicidio a lesiones con la agravante de género. Así, el agresor machista deberá cumplir cuatro años y medio de prisión, la mitad de lo que se le pedía inicialmente, e indemnizar a la víctima con 7.500 euros. Además se le impone una orden de alejamiento con dispositivo telemático de control cuando deje la cárcel y un periodo de libertad vigilada por un tiempo de otros cuatro años. Con la conformidad, el juicio ha quedado ya visto para sentencia.
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