Desarticulada una banda que cometió una oleada de robos en chalés de Bétera, Paterna y l'Eliana

Otro golpe a la delincuencia organizada. La Guardia Civil de Valencia ha desarticulado una banda que cometió una oleada de robos en los últimos meses en chalés de varias localidades de la provincia de Valencia. La operación 'Celerón' se ha saldado con la detención de varios miembros del grupo criminal tras una ardua investigación.

Los individuos arrestados, todos ellos de nacionalidad albanesa, forman parte de una organización delictiva que desvalijaba chalés, algunos de ellos de lujo, en urbanizaciones de Bétera, Paterna, Ribarroja, l'Eliana y San Antonio de Benagéber, entre otras poblaciones de la provincia de Valencia.

Los ladrones se apoderaban de dinero en efectivo y joyas en pocos minutos, y desechaban objetos de valor de gran tamaño, teléfonos móviles u otros aparatos electrónicos con sistemas de geolocalización que podrían delatarlos. Actuaban tanto de noche como de día con rapidez, destreza y sin violencia contra las personas.

Preferían robar en casas sin moradores dentro tras cerciorarse de que habían salido. Uno o dos individuos entraban en el chalé mientras otro miembro de la banda vigilaba detrás de un contenedor o agazapado dentro de un coche. También espaciaban los robos e incluso sustituían a los integrantes del grupo que cometía los robos para dificultar una posible investigación policial.

Las detenciones de los ladrones tuvieron lugar el jueves por la mañana en la pedanía valenciana de La Torre y la localidad de Silla. El Grupo de Patrimonio de la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia montó un operativo, con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC), para apresar a varios miembros de la banda y registrar sus domicilios.

Los investigadores atribuyen al grupo delictivo la autoría de una oleada de robos tras detectar los dos coches que utilizaban para desplazarse, un Opel Insignia y un Mini, y situar los vehículos en las urbanizaciones en la misma franja horaria que cometían los delitos.

Aunque no hay datos oficiales sobre el número de robos y denuncias, policías locales, vigilantes de urbanizaciones y patrullas de la Guardia Civil han realizado más de 50 intervenciones en los últimos meses para frenar la oleada de delitos. La colaboración policial ha sido clave para identificar y detener a los miembros de la banda.

El pasado viernes, la Policía Local de Ribarroja detuvo a un hombre de nacionalidad albanesa por su presunta implicación en un robo cometido en un chalé, aunque no ha trascendido si este individuo tiene alguna relación con la banda desarticulada por la Guardia Civil. Otro hombre que le acompañaba logró escapar tras saltar una valla y los agentes que perseguían al sospechoso perdieron su pista en el límite de los términos de Ribarroja y l'Eliana.

Los investigadores atribuyen a la banda una decena de robos cometidos en los últimos meses en las urbanizaciones de Mas Camarena y Torre en Conill. Esta última cuenta con un servicio de seguridad privada que realiza rondas de vigilancia todos los días de la semana con vehículos eléctricos (más silenciosos que los vehículos con motor de gasolina o diésel) para no despertar a los vecinos por la noche. Incluso, los coches patrulla llevan un potente foco para iluminar las zonas más oscuras junto al campo de golf.

Los ladrones solían actuar entre las 19 y 22 horas, por lo que guardias civiles de paisano realizaron operativos de vigilancia en esa franja horaria. Los investigadores utilizaron medios tecnológicos para localizar y seguir a los delincuentes, lo que ha permitido esclarecer un gran número de robos en cinco localidades, al menos, de la provincia de Valencia. Otras urbanizaciones donde actuó la banda son Monte Alcedo, Les Teules, Colinas de San Antonio, Montesano y San Vicente, según las investigaciones del Grupo de Patrimonio de la Guardia Civil de Valencia.

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