El detenido declara que Marta Calvo murió tras mantener relaciones sexuales con consumo de cocaína

El hombre detenido por la muerte de Marta Calvo declaró ante la Guardia Civil que la joven murió «de forma accidental» durante una práctica sexual conocida como 'fiesta blanca', con consumo de cocaína, en la vivienda de Manuel donde se pierde la pista de la joven en la madrugada del 7 de noviembre.

La versión de los hechos que dio el presunto homicida era ya una de las hipótesis que barajaban los investigadores del caso antes de interrogarlo en el cuartel de la Guardia Civil de Carcaixent. Durante su extensa declaración, que duró cerca de cinco horas con varias pausas, Jorge Ignacio P. J., de 37 años, explicó a los agentes cómo habría fallecido Marta por un paro cardíaco o una grave intoxicación de cocaína, según su manifestación, tras consumir esta sustancia estupefaciente por una vía que permite su inmediato contacto con la sangre.

Durante el interrogatorio, los investigadores plantearon en sus preguntas las dudas que iban surgiendo cuando relacionaban las pruebas y pistas que han obtenido en los últimos días con la versión de los hechos que dio el detenido. También centraron el interrogatorio en la muerte de una prostituta en similares circunstancias tras consumir cocaína en otra 'fiesta blanca' en una casa de citas en el distrito de Ruzafa. La mujer falleció el pasado mes de abril en un hospital de Valencia.

Como ya informó en exclusiva LAS PROVINCIAS, la Policía Nacional investigó a Jorge Ignacio P. por un delito de omisión del deber de socorro tras averiguar que había sido el último cliente de la mujer y había huido de la vivienda cuando ella comenzó a sufrir convulsiones.

Sus compañeras de piso, prostitutas también, acudieron a la habitación para ver si la víctima había sufrido alguna agresión o robo, como sucede en ocasiones en las casas utilizadas como prostíbulos, y hallaron a la mujer con una crisis convulsiva con pérdida de consciencia.

Tras llamar al 112 para pedir una ambulancia con urgencia, las meretrices informaron a la policía de la actitud sospechosa del cliente que estaba con la mujer momentos antes de que comenzara a sufrir las convulsiones. Sin embargo, no sabían el nombre de este individuo ni su dirección ni ningún dato que pudiera ayudar en su identificación. Días después, la prostituta falleció en un hospital de Valencia y la Policía Nacional abrió la correspondiente investigación para esclarecer la muerte de la mujer.

Aunque no ha trascendido el resultado de la autopsia, la policía barajó la posibilidad de que la víctima hubiese fallecido en una 'fiesta blanca' tras consumir la cocaína que le habría facilitado el hombre ahora detenido por la desaparición de Marta Calvo. Según informaron fuentes policiales, los forenses descartaron una muerte homicida y determinaron que la mujer pudo sufrir una parada cardiorrespiratoria por una intoxicación de cocaína tras hallar restos de esta droga en su organismo.

Cuando se refirió a este caso durante su declaración en el cuartel de Carcaixent, el presunto homicida declaró que huyó por temor a que la policía pudiera culparle de la muerte accidental de la prostituta, el mismo motivo que adujo para explicar por qué descuartizó el cadáver y arrojó los restos humanos en una decena de bolsas de basura a varios contenedores de basura.