Ver fotos

Una de las estructuras derribadas por el viento en el recinto del festival. IVÁN ARLANDIS

La estructura metálica que aplastó y mató a un joven en el Medusa estaba anclada con dos maceteros

El ingeniero que supervisó las instalaciones del festival calculó que los recipientes llenos de tierra pesaban más de 1.000 kilos cada uno

Javier Martínez

Valencia

Viernes, 19 de agosto 2022, 00:14

La Guardia Civil de Cullera y el perito judicial continúan investigando las causas del trágico accidente ocurrido en el Medusa Sunbeach Festival para determinar con exactitud todos los factores y circunstancias que provocaron el colapso de las estructuras metálicas.

Publicidad

El ... ingeniero designado por el juez y los agentes que inspeccionaron el recinto tomaron fotografías y midieron los elementos de sujeción del escenario y los pórticos de la entrada y la zona de los servicios, donde falleció el joven de 22 años y la mayoría de los heridos fueron aplastados o golpeados por los hierros.

Según han confirmado fuentes de la investigación, la estructura metálica que aplastó a la única víctima mortal del accidente tenía dos columnas ancladas con sendos maceteros llenos de tierra que pesaban más de 1.000 kilogramos cada uno.

El perito judicial examinó de forma minuciosa los dos recipientes para calcular con una fórmula matemática el peso y la resistencia de ambos, aunque el ingeniero que supervisó la instalación antes de que comenzara el festival ya había determinado que los maceteros llenos de tierra tenían un peso superior de 1.000 kilos.

Publicidad

Además, los especialistas de la Guardia Civil y el perito también inspeccionaron y fotografiaron las correas utilizadas para atar las columnas metálicas del pórtico a los recipientes que realizaban la función de contrapeso.

Tras inspeccionar dos veces las estructuras colapsadas, el perito tendrá que realizar un informe para determinar el peso de los elementos de anclaje y su resistencia ante fuertes rachas de viento como las que provocó el reventón térmico en la madrugada del 13 de agosto.

Publicidad

En cuanto al escenario principal, la estructura fue montada por una empresa contratada por los organizadores del evento e inspeccionada después por un ingeniero, el mismo que supervisó los maceteros que anclaban los pórticos de la entrada y otras zonas del recinto.

Como ya informó este periódico, la estructura metálica tenía un gran número de depósitos de 1.000 litros de agua en su base para sostener el escenario y resistir la fuerza del viento. Los recipientes se encontraban en la parte trasera y no se podían ver desde la explanada donde estaba el público.

Publicidad

Una vez montada la plataforma similar al armazón de hierros de un andamio, el artista fallero Manolo García y su equipo se limitaron a sujetar con bridas y alambres el paramento decorativo de chapa que habían elaborado por encargo del Medusa Sunbeach Festival.

Anticipo de la tragedia

Seis horas antes de la muerte del joven por el colapso de una de las estructuras metálicas, varios jóvenes grabaron con sus teléfonos móviles cómo caía la primera pieza del escenario principal, concretamente un trozo de corona, debido a una ráfaga de aire, pero el personal del festival retiró el trozo de chapa y la música continuó como si nada hubiera ocurrido. Eran las 21:59 horas del 12 de agosto.

Publicidad

Varios de los heridos consideran que la junta de seguridad del festival debía de haber suspendido entonces el evento, tal y como hizo el Ayuntamiento de Cullera al no autorizar el castillo de fuegos artificiales esa misma noche.

Al día siguiente de la tragedia, la Guardia Civil comprobó que algunos puntos de anclaje del escenario principal se encontraban intactos pese a tener los mismos elementos de sujeción que la parte derribada por el viento. Esto confirma la acción errática de las rachas de más de 80 kilómetros por hora que desencadenó el reventón cálido. La lengua de aire caliente afectó de forma muy desigual a las estructuras metálicas del recinto.

Noticia Patrocinada

El último parte meteorológico

 El último boletín de información meteorológica remitido por el Centro de Coordinación de Emergencias a los ayuntamientos, previo al trágico accidente, fue a las 22.10 horas del viernes. El parte avisaba del riesgo de tormentas, con nivel amarillo, en el interior de la provincia de Valencia, pero no incluía el litoral.

Sin embargo, media hora antes de que la ventisca de aire caliente derribara varias estructuras metálicas en el Medusa, la Agencia Estatal de Meteorología advirtió en Twitter de que se estaban produciendo los temibles reventones cálidos en la Comunitat Valenciana.

Publicidad

Además de la peritación sobre los anclajes, el juez de Sueca que instruye la causa ha encargado otro informe a un experto climatólogo de la Agencia Estatal de Meteorología en la Comunidad Valenciana para tener más información de las inclemencias del tiempo antes de tomar declaración a los organizadores del evento.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad