Otro grave accidente en la curva de Viveros

Tres jóvenes sudamericanos resultaron heridos al chocar el coche en el que circulaban contra la verja y un pilar de los jardines de Viveros en Valencia. El accidente tuvo lugar sobre las tres y media de la madrugada en la confluencia de la calle General Elio y la avenida de Blasco Ibáñez, un punto negro donde se han registrado numerosos siniestros, uno de ellos con una víctima mortal, en los últimos años.

El conductor del vehículo perdió el control del mismo cuando tomaba la curva y el coche atravesó el carril bici, irrumpió en la acera y se estrelló contra la verja. Según las primeras investigaciones de la Policía Local, el exceso de velocidad del turismo causó el siniestro.

La parte delantera del vehículo quedó destrozada tras impactar contra la puerta de hierro forjado y derribar también el pilar. El conductor y otros dos ocupantes del coche sufrieron heridas leves y fueron trasladados al Hospital Clínico. Varias patrullas de la Policía Local acudieron con urgencia para auxiliar a los heridos y regular el tráfico. También se desplazaron al lugar una ambulancia y un equipo de atestados de la Unidad de Tráfico de la Policía Local. Antes de que llevaran al hospital al conductor, un agente le realizó la prueba de alcoholemia, pero no superó la tasa máxima permitida. El etilómetro marcó 0,20 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

Este accidente vuelve a poner en evidencia la peligrosidad de este punto negro en la ciudad de Valencia. En los últimos años se han registrado numerosos siniestros en esta curva por el exceso de velocidad de los vehículos que circulan por la avenida de Blasco Ibáñez.

El Ayuntamiento de Valencia, como en anteriores ocasiones, cargará ahora los costosos gastos de reparación de la valla al seguro del vehículo. Según datos facilitados por la Policía Local de Valencia, en 2013 se produjeron hasta once accidentes con cinco heridos en este punto negro, y todos los años se registran varias salidas de vía en la misma curva.

El 8 de diciembre de 2004, un joven rumano de 25 años murió al chocar la furgoneta en la que viajaba contra una de las puertas de hierro del parque. El siniestro se produjo al salirse el vehículo de la calzada en la misma curva. Una chica de 22 años, ocupante también de la furgoneta, sufrió heridas muy graves.

Desde la muerte de este joven, el Ayuntamiento de Valencia ha adoptado medidas para prevenir accidentes en este cruce, como un cambio en la secuencia de los semáforos o señales luminosas, pero las salidas de vía se suceden en este punto y los coches se estrellan contra el enrejado y los pilares de piedra. Tras otro accidente ocurrido el 25 de diciembre de 2016, la verja del acceso principal de Viveros estuvo destrozada más de un año. La reconstrucción costó 9.740 euros e incluyó pilares y elementos de forja.