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E. P./R. G.
Viernes, 30 de junio 2023, 15:17
La Guardia Civil ha detenido a los presuntos responsables de una plantación de cannabis en pleno centro de Palma de Gandia, donde los agentes del instituto armado intervinieron 4.757 plantas con un peso total de 287 kilogramos.
El pasado 31 de mayo, en el marco de la operación 'Ikelos', los agentes de la Guardia Civil lograron desmantelar un centro de producción de marihuana a gran escala que estaba oculto en una antigua nave industrial en el núcleo urbano de esta localidad de la comarca de la Safor.
Según pudieron constar los investigadores, la plantación era capaz de producir más de 5.000 plantas de cannabis en distintas fases de crecimiento, lo que aseguraba a los traficantes disponer de cosechas continuas durante todo el periodo anual.
Tras la obtención de las pruebas necesarias, los agentes de la Guardia Civil procedieron a la entrada y registro del inmueble e intervinieron 4.757 plantas de marihuana (que arrojaron un peso de 287 kilogramos), distribuidas en diferentes zonas, según informó la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia en un comunicado.
La compleja instalación, que mantenía las plantas en continuo crecimiento, disponía de los elementos de última generación, con lo que los cuidadores demostraban una alta cualificación, tanto en los cuidados, como en las instalaciones fabricadas al efecto. Lograban obtener la energía eléctrica por la conexión directa a la red de enganches trifásicos para poder abastecer toda la producción, actuando con mismo 'modus operandi' con el agua.
La puerta de acceso a la plantación permanecía oculta detrás de un armario para evitar ser descubierto por terceros, y una vez traspasada, disponían de más de 600 metros cuadrados de instalaciones con todo el material para la producción, recolección y secado de la sustancia ilícita.
Por estos hechos, la Guardia Civil ha detenido a dos hombres, de 60 y 24 años de edad y de nacionalidad austríaca, que se encargaban del cuidado y mantenimiento de las instalaciones. Los individuos se encontraban dentro del inmueble en el momento de realizar el registro.
Los investigadores atribuyen a los detenidos los delitos contra la salud pública (tráfico de drogas), defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a grupo criminal, habiendo decretado la autoridad judicial su ingreso en prisión comunicada y sin fianza.
Además, los agentes de la Guardia Civil han intervenido 8.400 euros en metálico, 55 monedas de con un valor de 2.500 euros, una furgoneta utilizada en los ilícitos y múltiple material como luminarias, humificadores de ozono, extractores y aparatos de aire acondicionado, con un valor superior a los 120.000 euros.
Las diligencias de la Guardia Civil han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Gandia, que se hizo cargo de la causa, según informaron las mismas fuentes del instituto armado.
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