La Policía analiza los globos de 'gas de la risa' hallados en el lugar de la violación grupal de la Malvarrosa

Como ya informó LAS PROVINCIAS, los hechos sucedieron sobre las cinco de la madrugada del sábado (28 de octubre) en un solar utilizado como aparcamiento a escasos metros de la discoteca Akuarela y el cuartel del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil.

La víctima denunció que fue agredida sexualmente por tres jóvenes después de que acudiera al descampado con uno de ellos, aunque las grabaciones de una cámara del cuartel muestran la presunta implicación en los hechos de otros tres varones. Tras tomarle declaración, los policías que llevan la investigación dan credibilidad al testimonio de la joven, de 18 años de edad, quien ha mantenido siempre la misma versión con algunos matices.

La chica declaró que sintió mucho miedo cuando la forzaron y que no gritó para pedir auxilio, porque pensaba que si lo hacía le pegarían una paliza. Escuchaba lo que hablaban sus agresores, pero no pudo ver sus caras. «Ahora te toca a ti», dijo uno de los individuos, pero la joven desconoce si se referían al consumo de droga o a la agresión sexual, porque no veía nada. Estaba con la cabeza bajada todo el tiempo después de que los jóvenes la sujetaran por el cuello y la empujaran contra la parte trasera de un vehículo.

Según un testigo, los presuntos agresores sexuales detenidos por la Policía estaban aspirando el conocido como 'gas de la risa' junto al vehículo Mercedes donde dos de los individuos forzaron a la chica. Cuando salió de la discoteca Akuarela para buscar el coche de un amigo, el testigo vio cómo discutían cinco jóvenes por unas pequeñas bombonas que contenían, al parecer, óxido nitroso. Poco después, el grupo huyó en un coche cuando vio que se acercaba la víctima, que estaba llorando, acompañada de un guardia civil.

Durante la inspección del lugar donde tuvo lugar la presunta violación, los policías hallaron globos desinflados de color rosa utilizados por los sospechosos para consumir el gas anestésico. También encontraron un pendiente de la víctima.

La inhalación del óxido nitroso puede provocar graves trastornos. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios estima que el uso no médico de este gas incoloro representa un riesgo para la salud. Esta sustancia lleva asociada riesgos de asfixia debido a su naturaleza de gas licuado comprimido, según un informe del Plan Nacional sobre Drogas.

Al funcionar como anestésico también puede provocar alucinaciones, vocalización incontrolada, alteraciones de la percepción, desorientación espacial y temporal o reducir la sensibilidad al dolor, según la misma fuente oficial.

La víctima declaró que no recordaba haber consumido cocaína de forma voluntaria, ni antes ni después de la agresión sexual, por lo que no pudo explicar a la Policía por qué hallaron restos de esta droga en su orina. También manifestó que desconocía la forma en la que pudo tomar esta sustancia estupefaciente, pero admitió que había fumado un porro en la discoteca, y por este motivo detectaron cannabis en su organismo en las analíticas que realizaron en el Hospital Clínico dentro del protocolo de actuación sobre agresiones sexuales.

La joven afirmó que uno de los detenidos le ofreció cocaína que supuestamente tenía en su vehículo, pero insistió en que ella no quería consumir esa droga. Aunque la joven entregó varias prendas al forense para que trataran de obtener muestras de ADN de los violadores, días después lavó el resto de la ropa que llevaba cuando ocurrieron los hechos y la Policía no ha podido analizarla.

Los agentes de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional, que se hicieron cargo de las investigaciones, detuvieron a tres jóvenes por la presunta violación grupal, pero solo ingresó en prisión uno de ellos. Los tres individuos tienen 23 años y cuentan con antecedentes delictivos, dos de ellos por delitos sexuales. Aunque se acogieron a su derecho a no prestar declaración, uno de los detenidos admitió que había mantenido relaciones sexuales con la denunciante, pero afirmó que fueron con el consentimiento de la chica.

La Policía ha identificado a un cuarto joven, un menor de edad, que habría participado en la violación grupal, presuntamente, y continúa las investigaciones para localizar a otros dos implicados que se unieron al grupo cuando la joven asegura que la agredieron sexualmente.

Dos de los detenidos se opusieron a que la Policía Científica les tomara sendas muestras de ADN para cotejarlas con los restos biológicos hallados en la ropa de la víctima. Uno de ellos es el joven que ingresó en prisión.