Un conductor recibe un tiro de escopeta cuando circulaba con su vehículo por una carretera de Moncada

Tras oír dos disparos y sentir los perdigonazos en su cara, el hombre mantuvo el control de su furgoneta, redujo la velocidad y detuvo la marcha tras recorrer unos 200 metros para llamar al 112 y pedir auxilio. Los hechos sucedieron sobre las seis de la tarde del martes cerca del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA).

Una patrulla de la Policía Local de Náquera y otra de la Guardia Civil de Moncada acudieron con urgencia al lugar. Los agentes auxiliaron a la víctima y realizaron una batida por la zona para buscar al autor de los disparos. La furgoneta también presentaba impactos de balines en la puerta del conductor.

Según las investigaciones de la Guardia Civil, el hombre fue alcanzado por un tiro que habría realizado un cazador, al parecer, con su escopeta de cartuchos desde un campo de naranjos cercano. «Los guardias civiles estuvieron un buen rato en un campo junto al vivero. Miraban mucho al suelo como si buscaran cartuchos», afirma el trabajador de una empresa del polígono.

«Hay muchos conejos y los vemos cruzar por la carretera, pero ahora sólo se pueden cazar con perros, y no con escopeta», añade un agricultor de Moncada. La temporada cinegética comienza el próximo 12 de octubre para algunas especies en cotos y otros lugares con restricciones.

Sin embargo, en la zona donde ocurrieron los hechos no se puede cazar porque hay empresas cerca, además de la proximidad de la A-7, una de las autovías que más circulación y retenciones soporta en la Comunitat Valenciana.

Para evitar daños a las personas y los bienes, la ley que regula la caza en la Comunitat Valenciana establece una zonas de seguridad con «límites de 50 metros a contar desde los extremos de viviendas aisladas, jardines y parques destinados al uso público, recintos deportivos, instalaciones recreativas autorizadas y emplazamientos industriales».

Los caminos públicos asfaltados, las vías férreas y los canales navegables también tienen el mismo límite de 50 metros, a contar desde el borde, para evitar que los disparos puedan alcanzar a personas o vehículos.

El conductor alcanzado por el disparo sufrió lesiones leves en una oreja y un brazo por los impactos de los perdigones, pero las heridas no revisten gravedad, según informaron fuentes médicas.

El 18 de noviembre de 2021, un ciclista resultó también herido al recibir otro tiro de escopeta cuando circulaba por un camino forestal del monte Orgegia en Alicante. Un centenar de perdigones impactaron en el cuerpo de la víctima. La Policía Local identificó a un cazador como autor del disparo tras acudir con urgencia al lugar.