Hallan muerto a un hombre tras atrincherarse con una pistola con su familia en Alaquàs

Alaquàs ha vivido hoy tres largas horas de tensión en las que la incertidumbre se apoderaba de todo el vecindario, que esperaban expectantes en las inmediaciones de la calle Federico García Lorca. Cerca de las 13.00 horas llegaba el primer aviso de que se estaba produciendo una disputa familiar en la que podrían haber involucradas armas de fuego. Más tarde, se confirmaban las sospechas. Después de atrincherarse dentro de una habitación durante varias horas, un hombre se ha quitado la vida de un disparo en el pecho.

El fallecido sabía cómo accionar el arma para no fallar. Como confirman fuentes policiales, era tirador olímpico y tenía en su poder un par de armas cortas. Ha accionado sólo una vez el gatillo. Para cuando los GOES han podido entrar en la estancia, el varón ya había muerto. Hasta el domicilio también se han desplazado con urgencia agentes de la Policía Nacional y Local de Valencia y Alaquàs, antes de solicitar la presencia de efectivos sanitarios y agentes del Grupo de Operativos Especiales de Seguridad (GOES).

Los primeros en llegar han sido los agentes de la Policía Local de Alaquàs, que han conseguido sacar del domicilio a la mujer y a los dos hijos del fallecido, que no presentaban daños físicos. Después, les ha atendido un dispositivo del SAMU para recibir asistencia tras haber sufrido un trauma de ese calibre.

El tiempo transcurría a paso aletargado. Pero eso no ha sido un impedimento para los vecinos de la calle Federico García Lorca que han esperado en el lugar hasta que se ha confirmado el fallecimiento del hombre, apelotonados detrás de la zona acordonada. Primero, una negociadora ha subido a la vivienda. Pero poco tiempo después, la abandonaba. Eran las 16.00 horas y en la vivienda se personaron los efectivos del Grupo GOES, lo que ya dejaba entrever que no había sido posible llegar a ninguna negociación.

Todavía no se conocía en qué estado se encontraba el individuo que se había atrincherado en una habitación después de discutir con su mujer e hijos. Un cuarto de hora más tarde, los policías pedían a gritos que acudiera un médico. Pero los sanitarios también salían de aquella casa del horror poco tiempo después.

Después de casi tres horas de tensión llegaba la Policía Científica y se confirmaban las peores sospechas: el varón había muerto. Ha sido el alcalde de Alaquàs, Toni Saura, quien ha dado la información a los medios de comunicación y no ha abandonado el lugar del crimen en ningún momento. «Sabemos que es un hecho aislado porque el fallecido no tenía antecedentes policiales y pensamos que ha sido una cosa puntual. Hay muchas personas a las que la pandemia les ha afectado mucho a nivel mental», ha afirmado el alcalde de Alaquàs.

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