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Un policía nacional traslada al homicida al juzgado. Damián Torres
Un hombre que mató a cuchilladas a su pareja en Alzira se enfrenta a una pena de 25 años de cárcel

Un hombre que mató a cuchilladas a su pareja en Alzira se enfrenta a una pena de 25 años de cárcel

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, y también pide que le apliquen las circunstancias agravantes de parentesco y género

Javier Martínez

Valencia

Lunes, 21 de octubre 2024, 00:50

Un jurado popular juzga a partir de este lunes en Valencia a un hombre que mató a su pareja sentimental con un cuchillo de cocina, el 7 de junio de 2022, en una casa de campo en Alzira a la que acudieron aquel día para realizar labores agrícolas y echar comida a unas gallinas. Amparo Montalvá tenía 52 años y murió al recibir varias cuchilladas en el cuello y la cabeza.

La Fiscalía solicita una pena de 25 años de prisión para el procesado, Eduardo J. R., al considerar que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, y también pide que le apliquen las circunstancias agravantes de parentesco y género.

El juicio se celebrará en la Ciudad de la Justicia de Valencia. Los miembros del jurado popular deberán determinar si el acusado cometió el crimen de forma premeditada, y si conocía las intenciones de la víctima de poner fin a la relación, que había durado entre tres y cuatro años.

Según la Fiscalía, el encausado aprovechó que su pareja se encontraba en el gallinero, centrada en las labores avícolas, para apuñalarla en repetidas ocasiones, sobre todo en el cuello y la cabeza, sin que pudiera defenderse o escapar. La víctima sufrió numerosas lesiones, dos de ellas mortales.

Tras matar a su pareja, Eduardo J. huyó a Chella y permaneció escondido durante diez días en la casa de una hermana suya. El homicida fue detenido el 17 de junio de 2022 tras ser localizado porque solicitó información a la responsable del banco de alimentos. Necesitaba comida y estaba muy nervioso.

Una policía local de Chella pidió a Eduardo que le mostrara su DNI y entonces salió corriendo, pero fue alcanzado y detenido por la agente tras una persecución de unos 200 metros. El homicida se encontraba muy débil y no ofreció resistencia en el momento de su captura.

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