Los dos hombres que mataron a un anticuario en Valencia eluden la prisión permanente revisable

Los dos homicidas se enfrentan ahora a una condena de 15 años de cárcel cada uno tras el veredicto de culpabilidad emitido por el jurado popular. Otros dos acusados de planificar el atraco y proporcionar las armas utilizadas en el robo, Juan Pedro P. G. y Gerardo Agustín G. J., también se beneficiarán de una rebaja de pena al pedir el fiscal un año y medio de prisión para el primero y seis meses de cárcel para el segundo.

Planearon el atraco en un bar

Los hechos sucedieron el 13 de agosto de 2020 en una planta baja que el anticuario utilizaba como almacén y vivienda. Horas antes del homicidio, Carlos y Jorge Cristhian, de 66 y 43 años de edad y nacionalidades uruguaya y ecuatoriana, respectivamente, se reunieron con los otros dos acusados en un bar de Valencia para planificar el atraco, ya que sabían que el anticuario había cobrado una cantidad importante de dinero por la reciente venta de un cuadro.

En ese encuentro secreto, Juan Pedro P. entregó un maletín con una pistola detonadora y otra eléctrica a Carlos y Jorge Cristhian para que cometieran el robo. Horas después, los dos individuos se abalanzaron sobre el anticuario Laudencio Vallejo Tarancón, de 62 años, cuando estaba cerrando la puerta de su almacén. Los asaltantes empujaron al hombre hacia el interior de la planta baja y le dieron varias descargas con la pistola eléctrica.

Luego ataron a la víctima y le taparon la boca, los ojos y la nariz con cinta aislante para que dejara de gritar. El amordazamiento obstruyó las vías respiratorias y provocó la muerte del anticuario por asfixia mecánica. Carlos y Jorge Cristhian fueron detenidos por la Policía en la escena del crimen después de que un vecino llamara al 091 tras oír los gritos de la víctima. Tras una investigación, los agentes del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional arrestaron a los otros dos implicados.

El fiscal solicitaba en su escrito inicial la pena de prisión permanente revisable para los dos homicidas, pero un acuerdo de conformidad rebajará las condenas de los cuatro procesados. Los principales encausados fueron defendidos en el juicio por los abogados penalistas Jose Alcázar y Jorge Abadía.