«Gracias a Dios mi abuela está bien»

Son las horas después de una tragedia. La residencia de la tercera edad de Moncada amanece entre un aluvión de medio centenar de periodistas apostados en la entrada, en la calle Major, y las primeras visitas de familiares que acuden para interesarse por el estado de los suyos. Según les han informado desde el centro, estaban desayunando en torno a las nueve de la mañana.

Poco antes el presidente de la Generalitat, Ximo Puig se ha acercado a visitar las instalaciones. El olor a elementos quemados todavía deja huella de la tragedia y en el ala derecha de la residencia, todavía se aprecia la marca de la humareda en dos balcones de la fachada, en un primero y segundo piso. Mientras guardias civiles y policías locales aguardan en el exterior del centro, que está situado a 100 metros del ayuntamiento y junto a un huerto de naranjos.

Las familias, también las de los supervivientes han vivido momentos dramáticos. En especial por la incertidumbre de saber que la residencia estaba en llamas sin poder confirmar si los suyos estaban a salvo.

Son vivencias como la de Ana, nieta de una residencia de unos 90 años. Su primer sobresalto fue cuando dormía en el pueblo junto a su madre y vio pasar «una barbaridad de bomberos y policías». Su primer comentario fue: «Mamá, esto tiene muy mala pinta. Van a la residencia».

Además, en las redes sociales un vecino había colgado imágenes del incendio, lo que todavía agravó más su angustia. «Nos acercamos y un guardia civil nos dijo que no sabían nada, que ya nos llamarían». La confusión e incertidumbre de los primeros instantes.

«Después nos llegó un correo de la residencia que decía que había varios muertos y heridos, pero no sabíamos quienes. Ahora nos hemos acercado y gracias a Dios mi abuela está bien. No nos ha tocado». La hija de la superviviente «se ha pasado toda la noche pegada a su madre. No sabíamos nada. Si de las habían llevado a otra residencia. Nada».

• Temas
• Moncada
• Incendios en casas y viviendas de la Comunitat Valenciana