Una joven denuncia una agresión sexual en grupo junto a una discoteca de Valencia

La Policía Nacional investiga una violación grupal que sufrió una joven de 18 años en el barrio valenciano de la Malvarrosa. Los hechos sucedieron sobre las cinco de la madrugada del pasado sábado junto a una conocida discoteca y a escasos metros de un cuartel de la Guardia Civil.

Según la denuncia presentada por la víctima, cuatro jóvenes participaron en la agresión sexual después de que ella se fuera con uno de ellos a un descampado. La chica acudió esa noche a la discoteca con una amiga, pero salió del local con un joven y se dirigieron a un solar utilizado como aparcamiento.

Poco después llegaron otros tres varones, que la agredieron sexualmente tras rodearla junto a un vehículo. La víctima estaba aturdida porque había consumido alcohol, pero manifestó a la Policía que recordaba los hechos y que no quería tener relaciones sexuales con el grupo.

La Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional de Valencia se ha hecho cargo de las investigaciones para identificar y detener a los agresores sexuales, que se fueron en el coche de uno de ellos.

La víctima acudió a la Oficina de Denuncias y Atención a la Mujer (ODAM) de la comisaría de Abastos de la Policía Nacional, y el caso fue asumido poco después por la UFAM, un grupo especializado en la investigación de delitos sexuales. Los agentes revisaron las grabaciones de las cámaras de vigilancia de la discoteca para identificar a los cuatro jóvenes implicados en los hechos.

Según publica el periódico Levante-EMV, un testigo localizado por la Policía declaró que varios de los presuntos agresores llevaban globos en las manos, por lo que los investigadores sospechan que podrían haber consumido el llamado 'gas de la risa', una droga barata y popular entre los jóvenes, pero cuyo consumo puede conllevar graves secuelas.

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios estima que el uso no médico del óxido nitroso –‘gas de la risa’– representa un riesgo para la salud. Esta sustancia lleva asociada riesgos de asfixia debido a su naturaleza de gas licuado comprimido, según un informe del Plan Nacional sobre Drogas.

Al funcionar como anestésico disociativo también puede provocar alucinaciones, vocalización incontrolada, alteraciones de la percepción, desorientación espacial y temporal o reducir la sensibilidad al dolor, según la misma fuente oficial. Por ello, los policías de la UFAM investigan si la agresión sexual en grupo se produjo tras una posible sumisión química.

Los delitos contra la libertad sexual han aumentado en los últimos años en la ciudad de Valencia. El balance de criminalidad de 2022 recoge un aumento de las agresiones sexuales con penetración de un 97 por ciento en Valencia con respecto a 2019, según la estadística del Ministerio del Interior. El año pasado, la Policía Nacional recibió un total de 67 denuncias de víctimas de violaciones, algunas de ellas cometidas en plena calle, frente a las 34 agresiones sexuales contabilizadas en 2019.

En 2021, la Policía Nacional investigó 877 delitos contra la libertad e indemnidad sexual y 61 denuncias por agresión sexual con penetración en la ciudad de Valencia. Las cifras son alarmantes y desbordan a los grupos que investigan estos delitos: la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) y el Grupo de Menores (GRUME) de la Policía Nacional.

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