J. F.
Valencia
Martes, 27 de agosto 2024, 23:48
El joven de 26 años que provocó el caos ferroviario en Valencia, un inmigrante argelino que llegó el 19 de agosto en patera a Alicante, ... continúa ingresado en la unidad de psiquiatría del Hospital Doctor Peset tras ser detenido y puesto en libertad por la Guardia Civil. Djamed B. acumula dos detenciones en menos de una semana por un delito de atentado a un agente de la autoridad.
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Como ya informó este periódico, el inmigrante argelino agredió a un policía nacional nada más pisar territorio español, y seis días después lanzó una botella de cristal a un guardia civil tras subirse a la estructura metálica de la catenaria en Alfafar.
La invasión de la vía y la actitud violenta de Djamed obligó a cortar durante tres horas la circulación de trenes en ambos sentidos. Para evitar la electrocución del joven, Adif cortó el suministro eléctrico. Al lugar acudieron varias patrullas de la Guardia Civil de los cuarteles de Alfafar, Silla, Picassent y Aldaia, así como un equipo de bomberos, personal sanitario y policías locales de Sedaví y Alfafar.
Uno de los agentes de la Guardia Civil trató de convencer al joven para que bajara de la estructura donde estaba encaramado, pero este le lanzó una botella de vidrio. El guardia civil salió indemne porque se apartó en un rápido movimiento. También amenazó con arrojar piedras a cualquier persona que se acercara.
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Poco antes, el joven protagonizó otro alboroto en la Estación del Norte al proferir gritos y perturbar el orden. Los vigilantes de seguridad intervinieron de inmediato, y Djamed huyó por las vías del tren en dirección a las afueras de la ciudad.
Tras la mediación de tres ciudadanos marroquíes, el joven argelino bajó de la estructura metálica y fue detenido por la Guardia Civil por los delitos de desorden público, atentado a un agente de la autoridad y desobediencia grave. Horas después, Djamed ingresó en la unidad de psiquiatría del Hospital Doctor Peset, donde los médicos tratan de determinar el trastorno mental que sufre.
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La Guardia Civil tomó entonces la decisión de dejarlo en libertad y remitir las diligencias al juzgado de guardia de Catarroja. Sin embargo, la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia informó de forma errónea que el joven había sido puesto a disposición judicial.
Como consecuencia del incidente, unos 40 trenes sufrieron retrasos, miles de viajeros llegaron tarde a sus destinos y se formaron largas colas en la Estación del Norte y Valencia Joaquín Sorolla. La circulación ferroviaria se restableció cerca de las 22 horas del domingo.
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