«Ese monstruo ya no hará daño a nadie más»
Tribunales ·
El jurado culpa de asesinato, violación y profanación al joven que mató a la menor de Chella y lo aboca a la prisión permanenteTribunales ·
El jurado culpa de asesinato, violación y profanación al joven que mató a la menor de Chella y lo aboca a la prisión permanenteUn asesino machista. Un violador. Un profanador de cadáver. El jurado halló ayer culpable de estos tres terribles delitos a Rubén Maño. Él escuchó el veredicto con su cabeza enterrada entre las manos, entre gemidos de emoción contenida de la familia de la víctima. De manera unánime, el tribunal constató la culpabilidad del joven que en 2016 agredió sexualmente y luego mató a la joven Vanessa Ferrer antes de deshacerse de ella en una sima. Y con su decisión lo aboca a una sentencia de prisión permanente revisable. «Ella ya no volverá, pero ese monstruo ya no hará daño a nadie más», celebró Alba, la hermana de la víctima, a las puertas de la Ciudad de la Justicia.
Publicidad
Tras una larga deliberación, la lectura del veredicto llegó sobre la una de la tarde. En la sala estaban presentes muchas de las personas que querían a Vanessa: su padre, su madre, su hermana, familiares, amigas...
Fueron una treintena los puntos en relación al caso sobre los que el jurado se pronunció y lo hizo con una coincidencia pocas veces vista en los procesos con tribunal popular. Para empezar estimó probado que Rubén contactó con Vanessa para verse diciendo que iba a ir más gente a su casa, algo que no fue así. Una trampa. Se sustenta así la alevosía en el homicidio.
Segunda cuestión clave: Rubén sabía la edad de la chica: 15 años. La condición de menor o persona vulnerable en una víctima es uno de los puntos en los que se afianza la prisión permanente revisable, que conlleva pasar, al menos, 25 años entre rejas.
El jurado no duda de que el joven actuó contra Vanessa con manifiesta superioridad y y falta de respeto «por el hecho de ser ella mujer, pues quería mantener relaciones sexuales con cualquiera y Vanessa fue la primera que respondió« a su cita. Es otro aspecto crucial porque se amarra la agravante de género. Es decir, un manifiesto machismo movía los engranajes de su asesinato.
Publicidad
El principal argumento de Rubén durante el juicio fue que el día del crimen era una penosa marioneta de su adicción a las drogas y consumo en las horas previas. Pero eso también acabó por los suelos. De nuevo unánime, el jurado entiende que ni su voluntad ni su conocimiento se vieron afectados en aquel doloroso 26 de octubre en Chella.
También hubo coincidencia plena o por mayoría al considerar probado que, una vez Vanessa acudió a la casa, él le propinó golpes hasta dejarla casi inconsciente para luego ponerla de rodillas y violarla vaginal y analmente. Después la asesinó estrangulándola desde atrás con un propósito absolutamente práctico y egoísta: «no ser denunciado».
Publicidad
Y con Vanessa violada, muerta, semidesnuda y envuelta en un edredón, más crueldad. Mayoría o unanimidad en el jurado sobre la certeza de lo que vino después: llamó a un colega, le pidió el coche, cargó el cuerpo y lo arrastró a la sima de Los Borricos, el punto donde antiguamente los lugareños se deshacían del ganado muerto. Allí la tiró, a 30 metros de profundidad, «para que nunca pudiera ser encontrado el cuerpo». Confirmado así el tercer delito: la profanación. Para redondear su letal andadura, el asesino se deshizo de la ropa y el teléfono móvil de la víctima.
A la lectura del veredicto siguieron las lágrimas de las otras víctimas: los padres y hermana de Vanessa. Ellos ya recibieron otra condena permanente cuando el cuerpo de la menor apareció enganchado en un árbol de la sima. Los ansiolíticos, la necesidad de huir de Chella o la amargura y ganas de morir de un padre para el que Vanessa era «el principal apoyo en la vida». Así se pronunció Alba, la hermana: «Se ha hecho justicia, pero nada nos la devolverá. Ahora, que ella descanse en paz».
Publicidad
El abogado de la familia, Juan Molpeceres celebró «un exquisito fallo del jurado» que confirma «la agravante de género, el asesinato con alevosía, la doble violación y la profanación». Han entendido, ahondó, «que aunque hubiera consumido drogas eso no afectó a su voluntad de decidir». Chella, al fin, pasa página.
La otra cara de la moneda fue la de la defensa de Rubén Maño, absolutamente disconforme con la decisión del jurado al entender que no ha valorado correctamente las pruebas y testimonios expuestos durante las jornadas del juicio.
Publicidad
De hecho, tras la lectura del veredicto, el abogado Nicolás Hellín anunció que presentará recursos de «apelación, primero, y casación, después». El letrado consideraba los hechos un homicidio imprudente que conllevaría, a lo sumo, cuatro años de prisión. Entendía que Rubén merecía rebajas penales por su adicción a las drogas y porque el día del crimen el sospechoso iba «hasta las trancas» de alcohol y estupefacientes.
Su versión, y la defendida por el ya culpable en el banquillo, es que Rubén consumió drogas, quedó con Vanessa sin ocultarle que iban a estar solos y discutieron. Por lo que explicaron, ella se puso nerviosa al decirle que le gustaba otra joven y entonces, «para tranquilizarla», la agarró del cuello con la desgracia de que la mató. Dijeron abogado y sospechoso que no hubo violación ni golpes. Que como Rubén «entró en shock», casi «sin saber qué hacía», llevó a la menor a la sima y la arrojó.
Noticia Patrocinada
Si bien es cierto que algunos amigos del asesino constataron en el juicio que tomó drogas horas antes del crimen, el jurado ha creído más al psiquiatra forense que examinó a Rubén para concluir que los estupefacientes no mermaron su voluntad o conocimiento. También a los otros médicos que, tras la autopsia, concluyeron sin duda que la víctima fue golpeada hasta el aturdimiento y presentaba signos de una doble violación.
Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.