Un perito analizará en la Ciudad de la Luz el castillo hinchable en el que murieron dos niñas

La medida ha sido adoptada tras solicitar la magistrada que se habilitara un lugar en el que poder montar el castillo siniestrado, con tal de que sea examinado por el especialista en caso de que el juzgado acabe determinando que pueda existir algún tipo de responsabilidad penal o civil.

Fue a comienzos de marzo cuando el juzgado pidió a la Subdirección General de Infraestructuras Judiciales un informe sobre la posibilidad de almacenar el castillo en aquellas instalaciones. En la Ciudad de la Luz hay dos naves que en febrero fueron arrendadas por la administración para ubicar allí un archivo documental y un archivo de piezas de convicción.

En su informe, desde Infraestructuras Judiciales se indicó al juzgado que la nave tiene «una estructura perimetral de hormigón armado y pórticos de acero, cuenta con sistema de seguridad y un emplazamiento adecuado para los fines de custodia, sin riesgos de inundación». Dicho escenario está situado además muy cerca de sedes judiciales como el Palacio de Benalúa de Alicante, apenas a cinco kilómetros.

La conclusión que la administración valenciana traslada al juzgado de Mislata es que la nave «es perfectamente apta para la custodia y almacenaje de piezas de convicción, siendo precisamente este uso para el que ha sido arrendada».

Ante este dictamen de la Generalitat, la juez determina en la providencia que se indique a la Brigada de Homicidios de la Policía Nacional la decisión tomada por la magistrada. El juzgado indica a los investigadores que informen de la «viabilidad, modo y forma de proceder al traslado del castillo hinchable». Los agentes de Homicidios fueron los que inspeccionaron la atracción tras el siniestro ocurrido en Mislata y los que la trasladaron al lugar en que se halla custodiada ahora. Fuentes jurídicas señalaron que la dificultad reside ahora en encontrar un vehículo y procedimiento adecuados para trasladar hasta Alicante un objeto tan voluminoso.

La investigación de la Policía Nacional sobre la muerte de las dos niñas en el castillo hinchable de Mislata detectó irregularidades, como ha informado LAS PROVINCIAS. La más severa, una inadecuada ubicación de la atracción que causó la muerte de las dos pequeñas de 4 y 8 años al ser levantada por una ráfaga de viento en la tarde del 4 de enero. Y un incorrecto anclaje.

La conclusión de los investigadores a la vista de todas las pruebas, documentos y testimonios recabados en una intensa labor fue contundente. Teniendo en cuenta lo declarado por el fabricante y el ingeniero técnico de la atracción siniestrada, el castillo hinchable consta de 30 puntos de anclaje. Y de haber estado amarrados todos ellos en lugar de los «seis o siete» que declaró el feriante «ningún niño hubiera salido despedido», como subrayan los especialistas de Homicidios.