La policía investiga irregularidades de las peñas en la cogida del niño en Puçol

La policía autonómica se personó este lunes en Puçol para investigar el incidente que acabó con un menor de doce años corneado en la madrugada del domingo durante la celebración de la Setmana Taurina de Puçol.

El accidente ocurrió pasadas las tres de la madrugada y poco antes de que se diera por terminado el festejo. El menor, que se encontraba en el cadafal del recinto, fue enganchado por la vaca con uno de sus cuernos y lo embistió contra los hierros. La víctima sufrió tres cornadas y un fuerte traumatismo torácico. En estos momentos, se encuentra ingresado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Clínico de Valencia.

La normativa prohíbe que un menor pueda participar en el espectáculo pero sí que puede asistir desde las gradas. Las entradas, por otro lado, sólo las puede comprar un mayor de 16 años.

Ahora la policía de la Generalitat indaga si se cometió alguna irregularidad. La Associació de Penyes de la Setmana Taurina de Puçol señaló a los agentes que los menores fueron advertidos por los voluntarios de seguridad de que no podían estar en la zona e incluso se les llegó a acompañar fuera del recinto.

Una de las posibilidades que maneja la policía es si la organización tendría que haber sido más contundente para impedir la entrada de los menores y su ubicación dentro del recinto.

Tres de ellos, que tenían entre 12 y 15 años y son residentes en el Puerto de Sagunto, fueron acompañados hasta Puçol por la madre de uno de ellos que los llevó en coche sobre las once de la noche para luego pasar a recogerlos. Los tres habían quedado con unas amigas para asistir al espectáculo. La investigación se centra ahora en comprobar cómo consiguieron comprar las entradas sin estar acompañados de un mayor de 16 años.

En este sentido, se maneja la hipótesis de que alguien las adquiriera para ellos. Desde la Associació de Penyes se resalta que la organización del festejo «ha contado con todas las medidas necesarias para el correcto desarrollo del mismo, no vendiendo entradas a menores sin acompañamiento de adultos. Otra cosa es la utilización del engaño por parte de quienes sacan entradas a través de algún adulto que les presta ayuda para ello, siendo imposible en estos casos controlar de manera exhaustiva la venta de entradas».

En un comunicado, la asociación resalta también que en el recinto, «tanto en la cartelería como de manera reiterada por megafonía, se informaba de que los menores no pueden acceder al recinto donde se exhiben las reses y que únicamente podían permanecer en las gradas».

En este sentido, añade el comunicado que colaboradores voluntarios taurinos, «que se encargan de velar por la seguridad del festejo, nos comunican que advirtieron en repetidas ocasiones al menor que abandonara el recinto, acompañándolo a la zona exterior del mismo».

Tras el incidente, varias personas auxiliaron al menor y lo trasladaron a la zona donde se encontraba el médico que se encargó de proporcionarle los primeros auxilios hasta que fue introducido en una ambulancia y trasladado al Hospital de Sagunto. Allí, al ver las heridas, se decidió reenviarlo al Hospital Clínico donde fue intervenido quirúrgicamente y permanece allí en estado grave.

Antes de que comenzaran los bous al carrer, cuatro policías locales de Puçol comprobaron la documentación de los seguros, la asistencia del equipo médico con dos ambulancias y hasta las firmas de los colaboradores voluntarios para garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad que exige la normativa vigente.

Fueron estos agentes quienes se encargaron de localizar a la abuela del menor, con la que convive, aunque desconocía que su nieto se encontrara en el festejo de bous al carrer.

Tras los aplazamientos de los años de la pandemia, las peñas recuperaron en junio los festejos con el lema 'Por tu bien y el de la fiesta, vive los toros en modo 0,0' para reducir las cogidas y los incidentes.