La Policía Local multa menos en Valencia por falta de boletines

La carencia de impresos de multa afecta desde hace varios meses a todos los retenes de la ciudad, los policías motorizados de la Unidad de Tráfico y los agentes de la Unidad Convivencia y Seguridad (UCOS), una célula policial que realiza dispositivos de seguridad e interviene en numerosos incidentes de seguridad ciudadana.

Para paliar la situación, la mayoría de los agentes suelen realizar una selección de sanciones para no quedarse sin boletines de color rosa, y en muchos casos la intervención policial se salda con una reprimenda verbal. Otras veces piden apoyo a la patrulla más cercana para utilizar el boletín de denuncia de un compañero, por lo que se duplican servicios y agentes.

Pero en algunas intervenciones no pueden ejercer su potestad sancionadora, lo que provoca el enfado del reclamante y la alegría del infractor al librarse de la multa. Esto sucedió hace unos días cuando un ciudadano llamó a la sala del 092 para quejarse de un aparcamiento en doble fila que le impedía sacar su coche. Una patrulla de la Policía Local se desplazó al lugar y no multó al infractor, que llegó poco después y retiró su coche, porque no le quedaban boletines de denuncia.

Más de un policía cree que unos supuestos intereses electorales de los partidos que gobiernan el Ayuntamiento de Valencia podrían estar detrás de la escasez de talonarios. «Siempre ocurre lo mismo cuando se acercan las elecciones. Las multas quitan votos», afirma un policía local.

«La única explicación que nos dieron es que tenían problemas con la imprenta que trabaja para el Ayuntamiento, pero eso fue el año pasado y ahora estamos otra vez igual o peor, porque la Jefatura Provincial de Tráfico también está racionando los boletines», se queja el agente.

El secretario general del Sindicato de Policías Locales de la Comunitat Valenciana (SIPOL), Salvador Gimeno, reclama «una solución urgente», ya que considera que esta situación merma la capacidad que tienen los agentes para gestionar las infracciones de tráfico más habituales en la ciudad de Valencia.

En mayo del año pasado, el Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) ya denunció la carencia de boletines de denuncia y criticó la gestión del Ayuntamiento de Valencia «por dejar a los policías locales sin el material que necesitan para realizar su labor diaria».

Además, algunos retenes de la Policía Local de Valencia tampoco tienen suficientes boletines de denuncia de la Dirección General de Tráfico (DGT), que son los que utilizan para sancionar las infracciones relacionadas con la documentación de los conductores y los vehículos, como pueden ser el seguro obligatorio o la inspección técnica que tienen que pasar todos los automóviles.

Las patrullas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Valencia no tienen este problema de escasez de talonarios, ya que utilizan tabletas con impresoras para sancionar y muy rara vez rellenan un boletín. Sin embargo, las patrullas de la Benemérita que realizan servicios de seguridad ciudadana sufren los mismos inconvenientes que los agentes de la Policía Local de Valencia.

Los policías y guardias civiles se quejan de que esta carencia de documentos afecta a la seguridad vial, y en algunas ocasiones dificulta la circulación de vehículos al no poder sancionar, por ejemplo, los estacionamientos de coches en doble fila.

«La DGT nos da muy pocos boletines de denuncia. Es ilógico porque en los controles rutinarios detectamos y sancionamos muchas infracciones que conllevan pérdidas de puntos, y para hacer bien nuestro trabajo necesitamos más talonarios o dispositivos electrónicos», señala un guardia civil.