Dos policías nacionales de Valencia que participaron en el dispositivo para frenar los disturbios en Barcelona auxiliaron a un joven que resultó herido grave al sufrir una caída en las escaleras del establecimiento comercial donde trabaja. Tras ser avisados por un compañero de la víctima, los agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) taponaron la herida sangrante que tenía el joven en la cabeza y lo pusieron en posición lateral de seguridad.
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Mientras esperaban la llegada de una ambulancia, la víctima sufrió convulsiones y vomitó sangre, por lo que uno de los agentes que auxiliaba al joven, un oficial de la Policía Nacional destinado en la UIP de Valencia, le abrió las vías respiratorias para que expulsara la sangre y no se asfixiara.
Pocos después llegó al lugar un equipo sanitario, que realizó un vendaje en la cabeza a la víctima con la ayuda del policía, según informaron fuentes del sindicato Jupol (Justicia Policial) y de la Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valenciana.
Los sanitarios felicitaron a los policías por su rápida intervención para contener la hemorragia. El oficial utilizó papel de cocina para taponar la herida contusa de unos 10 centímetros que sufrió la víctima en la cabeza. El joven fue trasladado en una ambulancia a un hospital, donde quedó ingresado.
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