J. A. M. / J. M.
VALENCIA.
Sábado, 22 de febrero 2020
Las acusaciones sobre el sospechoso de la desaparición de la joven Marta Calvo siguen creciendo. Además de las dos supervivientes que denunciaron la peligrosa querencia de Jorge Ignacio P. J. hacia prácticas sexuales con cocaína en los genitales, otras seis mujeres han denunciado encuentros sexuales con un 'modus operandi' similar por parte del sospechoso. Cabe recordar que este es, según el narcotraficante, el modo en que murió Marta y que la Policía Nacional ha reabierto los casos de otras dos mujeres que fallecieron en condiciones similares.
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Esas declaraciones que elevan a ocho el número de mujeres vivas que obran ya en las diligencias de investigación fueron avanzadas por el programa Espejo Público. Con un sistema calcado: droga en los genitales, una práctica de alto riesgo de la que Jorge Ignacio no prescindió ni siquiera tras conocer que una de las mujeres con la que había estado había fallecido.
La clave ahora radica en establecer hasta qué punto, y como parece en algunos casos, el sospechoso sobrepasaba la línea del consentimiento mutuo, obligando presuntamente a las víctimas a una práctica que no deseaban mediante el uso de la fuerza o sedación.
En suma, son ya once las mujeres cuyos nombres orbitan, de un modo u otro, con los movimientos y pretensiones de Jorge Ignacio. La primera sería Marta Calvo, desaparecida hasta que no se confirmen los peores presagios mientras prosigue la búsqueda de sus posibles restos en el vertedero de Dos Aguas por parte de la Guardia Civil.
Tras conocerse el caso de Marta, y después de que el sospechoso se entregara y confesara que murió tras introducirle cocaína en sus partes íntimas, la Policía Nacional revisó dos casos de mujeres muertas y comenzó a investigar la relación con Jorge. Una de ellas es Marcela V., una joven colombiana de 26 años que falleció el 15 de junio del año pasado en un piso de Ruzafa, en Valencia. Poco antes, el 3 de abril del mismo año, Arliene R., de 32 años, había muerto en circunstancias parecidas en la misma zona de la ciudad.
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Además, ocho mujeres vivas han prestado declaración contra el sospechoso. El primer caso conocido fue el de una joven de 29 años de nacionalidad española. Manifestó, a grandes rasgos, que tras un encuentro con Jorge en su casa de Manuel (allí se pierde el rastro de Marta) había acabado sin conocimiento, presumiblemente con algún tipo de sustancia en la bebida, y con cocaína en sus genitales. La segunda voz contra Jorge la elevó una española de 43 años. Fue, según ella, un encuentro en el que tuvo que resistirse ante la supuesta agresividad del sospechoso con su empeño de la cocaína en los genitales. Desde entonces seis mujeres más han ofrecido un relato similar, según el espacio televisivo. La investigación continúa abierta en manos de la Policía Nacional y la Guardia Civil.
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